Se ha comprobado que hay una fórmula
para mejorar el estado de ánimo y la calidad de la vida:
“Actuar como si…”. Si quieres estar
alegre, actúa como si ya lo estuvieras y, poco a poco, la alegría será tu
compañera.
Si quieres ser paciente, obra como si
ya lo fueras, obra
en consecuencia y así será.
Hay
pruebas de que este ejercicio ha dado resultados sorprendentes a muchos deportistas.
Y
también hay estudios hechos en hospitales sobre cómo se recuperan los enfermos que hacen lo mismo.
Si actúas como si te fueras a sanar, la mente y el espíritu se
fortalecen y el cuerpo se reanima con ellos.
Si actúas como si ya estuvieras mejor, así termina siendo porque el
espíritu y la mente crean la realidad.
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