TODO ES GRACIA PARA UN BUEN AMANTE.

 

Una persona que ama verdaderamente encuentra belleza y significado en todo lo que hace, independientemente de las circunstancias. Esta persona ve la vida con una perspectiva positiva y aprecia las cosas simples, reconociendo la gracia en cada momento.

Un buen amante es aquel que ama incondicionalmente, sin importar las imperfecciones y los errores, y que siempre busca el bienestar y la felicidad de la persona amada. Esta actitud de amor y gratitud hacia la vida y las personas a su alrededor permite a un buen amante encontrar alegría y satisfacción en las pequeñas cosas de la vida, en lugar de centrarse en las adversidades.

REFLEXION

Nunca vivo nada inútilmente ya que toda experiencia me mueve a crecer y aprender algo.
 
Lo importante es que cada vez tenga un espíritu más fuerte para vencer los contrastes y vencer las batallas.
 
Sé que lo material es pasajero y que todo es para mi bien si lo tomo con paciencia y dulzura.
 
 A veces debo ser inamovible como una roca y a veces me conviene fluir como el agua y dejarme llevar.
 
No cejo en mi empeño de ser mejor y, en épocas turbulentas, logro lo mejor con una confiada espera.
 
 Como dice la sabiduría china, la vida del hombre trascurre entre el agua y el fuego que se alternan.
 
Sombra y luz se alternan, el derecho y el revés, el yin y el yang; días míseros y días felices.
 
 El sabio lo toma todo y todo lo transforma con la magia del amor y de una serena aceptación.
 
 Todo es gracia para un buen amante.