En Colombia una ínfima minoría de
poderosos posee extensos territorios con ganadería extensiva y sin cultivos.
Estos privilegiados tienen el 41% de
los 113 millones de hectáreas de uso agrícola. Es una minoría que representa el 0.4 % de propietarios.
La
realidad del campo colombiano muestra que el 70% de las fincas tienen menos de cinco hectáreas.
Son los
campesinos los que producen el 70% de la comida, y el país importa 10 millones
de toneladas en alimentos debido a los TLC.
“Colombia
ha sido gobernada por una clase política voraz y corrupta. A la cual ha
respondido una subversión frenética y errática.
Desde
la Colonia hemos sido un territorio sometido por el contrabando y la rapiña, se
ha instalado el narcotráfico.
Y de esta confabulación han surgido las
bestias del paramilitarismo y las bandas criminales”.
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