Existen
muchos tipos y variadas dietas para alimentar a nuestros peludos, desde las
dietas estrictamente naturales hasta la alimentación envasada por grandes
marcas que día a día son mejoradas en su proceso de producción.
Pero lo que no podemos olvidar en ningún momento es que la dieta que ofrecemos a
nuestro perro debe ser equilibrada y ayudarle a crecer sano y fuerte y por ello
merece la pena tomarse un tiempo para ofrecerle los alimentos para perros más adecuados
en función de su tamaño,
peso, edad y condición física.
Existe
una cultura heredada por la que en ocasiones les damos a nuestros perros
restos de nuestra propia comida.
A veces simplemente para ver qué cara ponen y otras veces simplemente porque con su
“carita de pena” al vernos comer despiertan nuestra ternura y decidimos
compartir algún bocado con ellos.
Pero
debemos saber y tener en cuenta que existen muchos alimentos que son realmente
tóxicos para nuestro perro y que no deben ingerir nunca.
Es
verdad que algunos de ellos en pequeñas cantidades pueden no dañar su
organismo, pero siempre es mejor evitar su ingesta.
Hoy les
vamos a relatar cuales son los alimentos tóxicos para perros más comunes y
peligrosos, alimentos
prohibidos, que no resultando necesariamente mortales, si resultarán
tóxicos para nuestros perros.
No
todos los perros reaccionan igual antes las toxinas de estos alimentos,
pero si resultan nocivas para todos en grandes cantidades.
Algunos de los alimentos para perros considerados como prohibidos
pueden resultar muy obvios, pero
merece la pena repasar el listado porque algunos de ellos pueden
sorprendernos o no tener
conocimiento sobre su toxicidad.
Alimentos
prohibidos para perros
Chocolate
Es un alimento muy nocivo para nuestros perros en
cualquier formato. Contiene una toxina denominada teobromina, inocua para los
humanos, pero realmente nociva para los perros. Puede provocar convulsiones,
vómitos, diarreas e incluso la muerte de nuestro regalón.
Cebollas
y ajos
Ya sean crudos o cocinados, estos alimentos son
igualmente tóxicos para nuestros perros. Contienen sulfóxidos que son capaces
de provocar una importante anemia a nuestro perro destruyendo los glóbulos
rojos de su sangre.
Si su perro ingiere este alimento no enfermará de
inmediato, puede tardar hasta cinco días en mostrar los síntomas tales como el
cambio en el color de la orina. Seamos prudentes y evitemos que lo ingiera por
accidente.
Lácteos
La lactosa que contienen este tipo de alimentos es
asimilada por la mayoría de los humanos gracias a una enzima llamada lactasa.
Los perros dejan de generar esta enzima a los pocos meses
de vida por lo que son incapaces de digerir la lactosa.
La ingesta de este tipo de alimentos por parte de nuestro
peludo puede producir diarreas, dolor de estómago y graves problemas
digestivos.
Este tipo de alimentos resulta muy apetecible para
nuestros perros y les gustan, así que hay que ser cuidadosos para evitar su
ingesta.
El queso tampoco es un alimento recomendado para perros
pues también contiene lactosa, aunque hayan sido fermentados. ¡Mejor evitarlos!
Mención aparte serían los yogures naturales que no
contienen lactosa, y pueden aportar a nuestro perro calcio y proteínas,
resultando por tanto beneficiosos para su salud.
Tomates,
patatas y paltas
Este tipo de alimentos no deben ser ingeridos nunca por
nuestros perros. Los tomates y patatas contienen oxalatos y glicoalcaloides; y
la palta contiene persina que causarán graves problemas digestivos y renales a
nuestro perro además de anomalías respiratorias llegando incluso a producirles
un coma.
Este tipo de alimentos no deben ser ingeridos por nuestro
perro ni crudos ni cocinados, aunque veamos cómo se relame cuando nosotros los
estemos comiendo.
Uvas
y pasas
Aún se está estudiando qué tipo de toxina contiene esta
fruta, pero lo que está demostrado es que son altamente tóxicas para nuestros
perros.
La ingesta de tan solo unas pocas uvas les puede provocar
una grave insuficiencia renal e incluso la muerte.
Si accidentalmente tu perro ha consumido uvas y no ha
enfermado, no te confíes y evita que vuelva a hacerlo.
Manzanas,
ciruelas y frutas con semillas
La fruta en sí no es nociva para nuestros perros, pero
las frutas que contienen hueso en su interior tales como ciruelas, duraznos,
manzanas, etc… son muy peligrosas para nuestros peludos.
En ese hueso se producen las semillas de la propia fruta
y estas semillas contienen pequeñas cantidades de cianuro, perfectamente
asimilables para los humanos, pero no así para los perros.
Los perros que ingieren estas semillas pueden presentar
hiperventilación, convulsiones y problemas respiratorios graves.
Además, el propio hueso de la fruta, ingerido
accidentalmente, puede provocar obstrucciones intestinales capaces de provocar
la muerte de nuestra mascota.
Hígado
Contiene una gran cantidad de vitamina A, que, no siendo
nociva en dosis adecuadas, es difícil de asimilar por nuestros perros y puede
causarles anorexia, deformación de huesos e incluso la muerte.
Aunque este alimento es utilizado en dietas naturales
como la dieta Barf, es importante no convertirlo en un alimento habitual de la
dieta de nuestro peludo y administrarlo sólo en pequeñas dosis y
preferiblemente cocinado.
Huesos
Es una costumbre heredada el proporcionar huesos a
nuestro perro. ¡Se ha hecho toda la vida!
Pero realmente los únicos huesos que debemos proporcionar
a nuestro perro son los huesos lechosos, tiernos o de rodilla de vaca o ternera
y siempre completamente crudos.
Los huesos cocinados pueden astillarse y provocar
problemas graves en el sistema digestivo del perro al quedarse clavados en
alguna parte del mismo.
Alcohol
Parece una locura que alguien quiera proporcionar alcohol
a su perro, pero a veces alguien se puede sentir tentado de hacerlo para ver su
reacción. ¡Es un tremendo error!
El
alcohol es un potente veneno para los perros y les puede producir un
coma e incluso la muerte.
Nueces
Estos frutos secos contienen altos contenidos de fósforo
y resultan tóxicas para nuestros perros.
Huevos
crudos
La cáscara de los huevos puede producir salmonelosis y
esta enfermedad al igual que para los humanos, puede resultar letal para
nuestra mascota.
Si queremos dar un huevo a nuestro perro, lo debemos
hacer siempre sin cáscara y preferiblemente cocidos.
Pescados
crudos y espinas
Los pescados crudos pueden contener parásitos y toxinas
peligrosas. Si queremos proporcionar pescados crudos a nuestros peludos es
aconsejable congelarlos unos días antes para que en el proceso los parásitos
mueran y no lleguen al sistema digestivo de nuestro perro.
Las espinas son peligrosas porque pueden causar problemas
en el sistema digestivo del perro al quedarse clavadas en alguna parte del
mismo.
Hongos
y setas
Contienen toxinas muy peligrosas para los perros. Les
pueden provocar diarreas, vómitos y problemas renales.
Evitemos la ingesta de este tipo de alimentos y si
accidentalmente cree que su perro ha podido ingerirlo, acuda rápidamente a su
veterinario.
Café
o té
La
cafeína es completamente intolerable por parte de nuestros perros y resulta un veneno muy potente
para ellos. Los perros no pueden ingerir nada que contenga cafeína ni
derivados.
Golosinas
y caramelos
El azúcar que contienen este tipo de alimentos y
especialmente el edulcorante llamado xilitol resulta muy nocivo para la salud
de nuestro perro.
Evitemos que los consuma accidentalmente en fiestas de
cumpleaños en las que las golosinas ruedan por la casa.
Sal
y levadura
La
sal puede producirles convulsiones y vómitos y en casos graves hasta la
muerte. Los perros no toleran la sal y no debemos nunca proporcionársela.
El
alimento indicado para el consumo de los perros ya contiene la proporción de
sal adecuada y no es necesario añadir nada más.
Por
su parte la levadura también resulta muy tóxica para los perros por lo que
nunca debemos dejarla a su alcance para evitar que la ingiera accidentalmente.
Acelgas
y espinacas
Este tipo de verduras son muy ricas en ácido oxálico que
resulta especialmente peligroso para la salud de nuestros perros.
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