Aquí tienes un truco sencillo y fácil de realizar.
Únicamente hace falta una vela y un encendedor...
1.- Enciende una vela y déjala encendida al menos 15 segundos.
2.- Sopla y apaga la vela.
3.- Acerca el encendedor a 3 cm de la vela sobre el humo que desprende la vela y esta se volverá a encender (a distancia).
Si después de apagar la vela, volvemos a prender el vapor, la llama viajara hacia abajo hasta llegar a la mecha... y encendiéndola de nuevo sin necesidad de tocarla.
La explicación de este fenómeno es que lo que arde en una vela no es la mecha, sino los vapores de la cera que ascienden.
Puede verlo en el siguiente video:
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