La naturaleza nos sorprende y nos acerca a Dios si somos capaces de ver
al Creador en tantas maravillas:
Un colibrí mueve sus alas a una velocidad asombrosa: cien veces por
segundo y por eso consume tanta energía.
Existe una araña buzo que sobrevive formando burbujas de aire
dentro de su telaraña.
Es bien curioso saber que los delfines duermen con la
mitad de su cerebro y que un pulpo tiene tres corazones.
Las crías de la araña cangrejo son terribles ya
que devoran a su madre después de nacer.
Uno de los peces más raros es el saltarín del fango. Allí vive y da grandes saltos para cazar insectos.
Para que tú tengas medio kilo de miel las abejas deben visitar dos
millones de flores.
Y la lista podría continuar para mostrarnos
que vivimos en un mundo lleno
de realidades sorprendentes.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios