No
huyas del fracaso o trates de ocultar las faltas. Mejor convierte el fracaso en
una oportunidad para crecer.
Si tú no estás dispuesto a fracasar, nunca serás capaz de
mejorar.
Para
ser más fuerte y más capaz, debes ir más allá de lo que ya sabes que puedes
hacer. Lógicamente sin hacer daño a los demás.
Es equivalente a levantar más peso grande de lo que has
levantado hasta ahora, para fortalecer los músculos. Experimentando el fracaso es
como descubres nuevas maneras de alcanzar el éxito.
El
fracaso y la decepción te pueden servir como oportunidades en la ruta para
alcanzar un magnífico logro.
Los tiempos difíciles, son oportunidades para crear buenas
buena relaciones, significativas, satisfactorias y gratificantes.
El
éxito no significa nada si no se crece. El fracaso es una parte necesaria e importante
para obtener el éxito.
El camino hacia el logro será siempre una prueba.
Debes estar dispuesto a asumir estas pruebas, y a trabajar
duro a través de estas pruebas, para que el logro sea tuyo.
Encomiéndate
a Dios para que te de sabiduría y para que te ayude a encontrar el camino para cumplir
tu misión en la vida.
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