Chaikovski (1840-1893) compuso música
sinigual para ballets como El lago de los cisnes, El cascanueces o Romeo y
Julieta.
Son piezas del repertorio clásico que
se siguen interpretando hoy
como también su Concierto número 1 para piano y sus sinfonías.
Fue un genio de la
música, pero con una vida atormentada y de muchos sufrimientos. Sobre
todo por ser gay.
Sufrió toda su vida ocultando su
condición sexual,
para lo que no dudó en mantener relaciones con mujeres.
Incluso
llegó a casarse con una de
sus alumnas, Antonina Miliukova, con la que tuvo una vida desdichada.
Sus penas lo llevaron a intentar
suicidarse lanzándose desnudo al río Moscova, de donde salió acaso con una pulmonía.
Lo
intentó de nuevo cuando el Zar supo de su homosexualidad y le pidió que lo hiciera por el honor propio y
el de Rusia.
Se
había declarado una epidemia de cólera en San Petersburgo y bebió agua sin hervir. Cuatro
días después falleció.
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