Hoy
en día, un profesional necesita desarrollar varias habilidades para ser capaz
de hacer frente a las diferentes demandas de la rutina en el trabajo. Y para
aquellos que quieren desarrollar y aplicar habilidades de liderazgo, es
necesario invertir en el aprendizaje para adaptarse a las nuevas demandas del
mercado.
PUEDES
EMPEZAR A SER UN LÍDER DE TI MISMO, IMPLEMENTANDO LOS SIGUIENTES PASOS:
–
CONÓCETE A TI MISMO: Todavía tenemos mucho que saber sobre nosotros
mismos y nuestras motivaciones. Nuestro comportamiento puede decir mucho sobre
eso. Debemos aprender, sobre todo, de nuestras emociones, a no dejarnos
arrastrar por ellas, no de manera negativa.
–
CONOCE TU ENTORNO DE TRABAJO: Infórmate sobre todo lo que pasa en tu
organización, busca estar al tanto de todos los procesos que rigen tu empresa.
Un buen líder tiene una visión amplía y conoce lo que está haciendo.
–
FÓRMATE: Nunca dejes de aprender, mantente actualizado. Es como dijo
Guimarães Rosa, diplomático y escritor brasileño: “el maestro no es el que
siempre enseña, sino el que aprende de repente”. Inspirado por esta
declaración, siempre busca adquirir conocimientos además de dedicarse a las
tareas cotidianas.
–
DALE IMPORTANCIA A TUS COLABORADORES: Una visión amplia de la
organización incluye, sobre todo, a los empleados, que son el eje de apoyo de
la empresa, responsables de los resultados de las tareas. Por lo tanto,
identifica en tu equipo las cualidades y puntos que deben ser mejorados, trabajando
siempre con respeto, confianza y motivación entre todas las partes.
Habilidades
del líder
Ser un líder es una competencia o capacidad que requiere el desarrollo de algunas habilidades primarias. Es importante sentirse líder, tener confianza en la toma de decisiones, demostrando un liderazgo inspirador, seguro y empático. Estas cualidades pueden ser reforzadas a través de una inversión en ti mismo.
LAS
PRINCIPALES HABILIDADES Y CUALIDADES REQUERIDAS PARA SER UN LÍDER SON:
Observador:
aprende a identificar cuáles son aquellas áreas de tu empresa en las cuales
debes trabajar más, sin perder nunca la filosofía de la misma, sin mostrarte
autoritario.
Comunicador:
mantén una comunicación fluida con tus empleados, estos pueden conseguir
soluciones a los problemas que les competen directamente cuando son escuchados
y atendidos.
Calmado
y paciente: las crisis surgen de manera repentina y las empresas deben
buscar alternativas con creatividad. Un líder no puede perder la calma, sino
que debe saber mostrarse sereno y conducir con mano firme a su empresa a puerto
seguro.
Efectivo:
El líder tiene un papel estratégico en la búsqueda de resultados, por eso, lo
anterior debe considerarse como una de las principales cualidades del líder
moderno: saber generar resultados.
Ser
flexible y estar preparado para el cambio también es fundamental. Vivimos en la
era de la competitividad, las cosas cambian muy rápido y el gerente tiene que
seguir este movimiento.
Capacidad
de tomar decisiones: tienes que saber cómo ser firme cuando sea
necesario. No siempre el equipo puede participar en el proceso de toma de
decisiones. El maduro es el que sabe cuándo tomar las riendas de la situación y
decidir solo. A veces toca hacerlo.
Compromiso
personal: el líder debe comprometerse con la maduración de cada uno.
Esta es la tarea más difícil, porque la maduración requiere la calibración
entre el desafío y el reconocimiento.
Disposición
para aprender: El líder es la figura principal en una organización, y
necesita tener un arsenal de nuevas herramientas, por tanto, debe innovar
permanentemente, buscar, investigar.
Capacidad
para actuar: No se puede llamar líder a cualquiera; un líder debe
demostrar que lo es, en la práctica.
Buen
ánimo: Por supuesto, debe transmitir optimismo, capacidad de resolver
problemas, solvencia moral y ética. Un buen líder es aquel que es capaz de
divertirse y ser creativo cuando se mueve entre tantas discontinuidades y
complejidades.
Por
último: la pasión por el trabajo es esencial para cualquier liderazgo.
Sin pasión, no se logra nada, y es poco probable que se crea en un líder que no
transmita pasión por lo que hace.
¿Por
qué desarrollar habilidades de liderazgo?
Un buen líder tiene la capacidad de influir en la gente para que trabaje con entusiasmo, con el fin de alcanzar los objetivos propuestos como el bien común. Saber involucrar a los empleados, lograr que ellos se comprometan con los objetivos de tu empresa, es tu insignia como líder.
Por
lo tanto, al ocupar esta función, es necesario dedicarse y tener la capacidad
de aumentar la eficiencia y la calidad del equipo, tratando de mantener
la motivación aliada a los objetivos de la organización. De esta manera, los
propios empleados se sentirán parte de algo más grande y el trabajo tendrá un
significado real para toda la organización.
Enseñar,
delegar, motivar y transmitir confianza son actitudes que un líder debe mostrar
a sus empleados y que no sólo favorecen el entorno profesional, sino
también al personal. Ser líder, además de una responsabilidad, es una gran
satisfacción, porque es un trabajo que busca inspirar y estimular la producción
de calidad, con el objetivo de obtener resultados positivos, tanto para la
empresa como para el equipo.
¿En
qué habilidades te gustaría invertir para convertirte en un líder ejemplar?
Según respondas a esta pregunta, prepárate para que sigas tu intuición, y
allana aquellas dificultades de las cuales eres consciente y, obviamente,
fortalece aquellas otras que sabes son positivas para lograr tus metas. Ser un líder es también mejorar
como ser humano.
Hoy
en día, tenemos líderes que exigen el mejor desempeño profesional de cada uno
de sus empleados. Pero por ello también el líder debe exigirse, en la medida
que demanda buen desempeño; aprender, en la medida que enseña; ser mejor, en la
medida que espera lo mejor de parte de sus empleados. Esto
es un círculo: el círculo de la excelencia.
Ser un líder es una competencia o capacidad que requiere el desarrollo de algunas habilidades primarias. Es importante sentirse líder, tener confianza en la toma de decisiones, demostrando un liderazgo inspirador, seguro y empático. Estas cualidades pueden ser reforzadas a través de una inversión en ti mismo.
Un buen líder tiene la capacidad de influir en la gente para que trabaje con entusiasmo, con el fin de alcanzar los objetivos propuestos como el bien común. Saber involucrar a los empleados, lograr que ellos se comprometan con los objetivos de tu empresa, es tu insignia como líder.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios