Si
tu mujer lo es todo para ti, tu confidente, tu mejor amiga, tu respaldo, tu
sosiego pero de repente ella decidió que no debían estar más juntos, no bajes
los brazos, todavía hay mucho que puedes hacer para salvar la relación.
Generalmente, una separación conyugal se debe a malos entendidos y a confusión
por parte de uno de los dos (o de ambos).
Lo primero y principal que has de tener en cuenta es la razón (o las razones) por las
cuáles ella ha decidido distanciarte de ti. Puede deberse a tu actitud
hacia algunas cosas, la rutina que apagó la llama del amor, que le guste otra
persona, que quiere probar estar sola un tiempo, que no se ponen de acuerdo en
cuanto a tener hijos, que no están en la misma sintonía sobre el dinero o los
planes a futuro, etc.
Entonces,
puedes o bien buscar la respuesta en tu interior u optar por hablar con tu ex
mujer. Si ella
accede, es un gran paso que estás dando en este camino de como recuperar a mi
esposa.
Pregúntale
qué es lo que le ocurrió a la relación, qué cosas has hecho mal en el último
tiempo, por qué ha tomado esta decisión, etc. Tal vez no tenga una
respuesta certera, no la presiones, cuando pueda y quiera hablará sobre el
tema.
Si ya tienes estos datos en tu poder, lo siguiente es
analizar qué puedes hacer con la información recopilada.
¿Vale la pena hacer un gran esfuerzo para recuperarla?
¿Cómo puedes solucionar todo aquello que ella te echó en
cara?
¿Cuánto es lo que debes cambiar para que ella esté feliz?
Los que han pasado por este momento y salieron airosos es
porque analizaron estos consejos.
Puedes
preguntarles a los separados que volvieron con sus parejas sobre qué es lo que
las mujeres desean. Una buena idea es hablar con una amiga mujer, tu hermana o
tu compañera de trabajo.
Empieza a cambiar por ti mismo
primero antes de hacerlo por tu ex pareja. Así veras mejores
resultados y sobre todo, te sentirás mucho mejor contigo. Si ella te ha dicho
que eres muy egoísta, dejar de serlo te convertirá en una mejor persona con el
prójimo, de nada vale darle todo a ella y no a los demás. Si es por culpa del
dinero, analiza la manera de que este bien material no te cambie la vida, por
ejemplo.
¡Regálate la oportunidad de
cambiar para bien, haz de ti un hombre maravilloso, justo para la mujer
maravillosa que quieres a tu lado!
Recuerda
cuando se casaron, que prometiste serle fiel, estar con ella en la salud y en
la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza y tantas otras cosas más. ¿Qué has
cumplido de todo eso?
Deberás
hacer un gran esfuerzo para reconquistar a tu esposa.
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