No
puedes basar tus acciones en lo ocurrido, sino en lo que te gustaría que
sucediera. No puedes cambiar lo que ya es, pero si puedes influir sobre lo que
será.
Elije tus acciones y respuestas basadas en los resultados
que deseas y no en lo que hayas experimentado. No es bueno dejar que el pasado
te controle.
En lugar de tratar de ganar una discusión, o de culpar a
los demás, pon tu energía en la creación de un nuevo valor. En lugar tener una reacción
negativa inútil, elige buscar un resultado útil y positivo.
No debes reaccionar con grosería o con rudeza y menos reaccionar
ante la injusticia con más injusticia. Decide ponerle fin a la negatividad y
centrarte en lograr los resultados deseados. Pídele a Dios que te ilumine.
Puede que no hayas tenido la culpa, sin embargo tu debes hacer
lo correcto. Así que aprovecha esta oportunidad extraordinaria.
Mira
hacia adelante y elige el mejor resultado para todos. Entonces actúa positivamente,
educadamente, y con entusiasmo poniendo todo tu esfuerzo para lograr el
resultado deseado.
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