Paracelso
fue un conocido médico y alquimista suizo nacido en 1495 y que murió en el año
1541.
Era
un librepensador en una época en la que eso era un pecado y también un
delito; estudió mucho los minerales.
La
medicina moderna le debe mucho porque él ayudó mucho que
se orientara por el lado científico.
Paracelso dio mucha importancia a los cuatro elementos: Tierra, fuego,
aire y agua.
Los asoció a estas figuras: La tierra
pertenecería a los gnomos,
el agua a las nereidas o
ninfas acuáticas.
El
aire a los silfos o espíritus del viento y el fuego a las
salamandras o hadas de fuego.
Hay personas serias que, aunque tú no lo
creas, aseguran que esos
seres de hecho existen, los han visto y no son fantasiosos.
La
vida de Paracelso te invita a abrir la mente y, al mismo
tiempo, a cuestionar, no
digerir sin más y tener sentido crítico.
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