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EL AMOR DE LAS MADRES TÓXICAS AGOBIA


Tener un hijo es uno de los regalos más grandes que puede recibir una mujer pero no todas saben expresar su amor de manera asertiva. Hay madres en extremo sobreprotectoras o demasiado controladoras que terminan limitando las capacidades de sus hijos. En este caso, se les puede considerar como “madres tóxicas” ya que sus comportamientos, aunque no estén dirigidos a causar daño, socavan la autoestima de sus hijos y coartan sus potencialidades.

Las madres tóxicas son aquellas que controlan en exceso a sus hijos, desde detalles tan mínimos como la ropa que usan hasta los sitios que visitan o las amistades que eligen. Además, a menudo recurren a la manipulación para poder controlar, sobre todo cuando el hijo va creciendo y puede tomar sus propias decisiones. En algunos casos incluso llegan a ser muy egoístas y se convierten en un verdadero suplicio para el hijo, que se debate entre el amor por su madre y la sensación de asfixia que le provoca su conducta.

¿Por qué algunas madres se convierten en “madres tóxicas”?
Una de las razones por la cual las madres se comportan de esta manera está vinculada a la infancia que ellas mismas tuvieron. Cuando se profundiza en su historia a menudo encontramos que durante su niñez fue controlada en exceso por sus progenitores y que estos incluso la humillaban o manipulaban.

Como muchos de nosotros tendemos a repetir el estilo educativo con el que crecimos, la historia se repite otra vez, pero en esta ocasión la víctima se convierte en verdugo. Se trata de un ciclo donde la madre pone en práctica las formas de educar y amar que le inculcaron en su niñez. De hecho, es curioso que muchas de estas mujeres afirman que jamás harían que sus hijos pasasen por lo mismo que ellas vivieron pero, sin darse cuenta, terminan adoptando el repertorio de comportamientos que tanto aborrecían.

En otras ocasiones, las conductas de las madres tóxicas se deben simplemente a rasgos personológicos y del carácter, o sea, se trata de mujeres tan dominantes y fuertes que necesitan mantener todo bajo control. En estos casos, casi siempre existe en la base una inseguridad ya que el control que ejercen sobre sus hijos es una forma de reafirmación personal que les hace sentir más seguras.

Pero ¿cuánto daño puede ocasionar una madre tóxica cuando el hijo(a) decide formar su propio hogar?, a continuación una serie de interrogantes que nos pueden ayudar a comprender mejor a aquella madre tóxica, o quizás nos ayude a descubrir que nosotras somos esa madre, que sin querer estamos causando dolor.

¿Es normal que madre e hijo ya casado sigan manteniendo una relación diaria o casi diaria?

Cuando los hijos deciden casarse ese es su nuevo hogar, es allí donde deben pasar el mayor tiempo. Compartir la comida en familia en la medida de lo posible y también celebrar la navidad en su propia casa. Una relación diaria o casi diaria con la madre no es sana, se debe procurar que la pareja se ocupe en el hogar que han constituido. Ello no significa que se deje de querer o de atender a las madres, sino que se debe soltar el apego. En la mayoría de los casos, quienes tienden a visitar o llamar todos los días a su madre es porque existe un sentimiento de culpa. Muchas madres manipulan a sus hijos recordándoles todo lo que tuvieron que hacer por ellos y pasan factura. Ahora tú debes atenderme a mí, actúan como víctimas, restándoles felicidad y estabilidad.

Siempre se nos ha hecho ver la imagen de la madre amorosa y bondadosa, resulta difícil imaginar que pueda ser tu propia madre quien represente el mayor problema de tu vida, pero esto es una realidad que hay que conocer y saberla tratar. Muchos hijos se sienten culpables si viajan porque dejan a su madre sola, si un fin de semana no fueron a visitarla y lejos de ser ese amor puro que tanto llena nuestras vidas se convierte en una carga que además puede causar grandes daños en el matrimonio. Facundo Cabral decía que hay que liberarse de parientes que nos extorsionan con enfermedades, en algunos casos las madres abusan de su condición.

Otras de las razones por las cuales algunos hijos no cortan ese cordón umbilical es la necesidad de aprobación, vamos por la vida queriendo satisfacer las necesidades de todo el mundo y olvidamos la nuestra. Como dice Ricardo Bulmez uno jamás dirá allí va mi ex mamá o mi ex papá pero uno si dice allí va mi ex mujer o mi ex marido. El matrimonio se debe cuidar y proteger a toda costa.

Hay padres que ponen a sus hijos en contra del cónyuge, con críticas, desprecio y buscando perjudicar en vez de unir ¿Cómo se puede sobrellevar esta situación?

No dándole cabida a la crítica y al desprecio, cuando los padres ven que su hijo respeta a su pareja y pone una barrera de protección, en algún momento se cansará de hacer comentarios insanos. Este aspecto es común y lo peor del caso, es que muchos hijos no se dan cuenta e ignoran cuan tóxica puede ser su madre porque creen que lo que dice es por amor o protección. Pero ninguna conducta que genere conflicto puede verse como amor. Los hijos deben ponerle límites a esta clase de padres, aunque les cueste aceptarlo y quizás se les haga muy difícil ir en contra de sus padres por temor a irrespetarlos, se debe tener muy claro que los padres también pueden estar equivocados y que además con sus virtudes y defectos esa ha sido la pareja que eligieron.

Cada quien debe asumir las decisiones que tomó para su vida. Hay hijos que no aceptan que su pareja haga ningún comentario sobre su madre y llegan a terminar una relación sólo por el hecho de no aceptar sus errores. En algunos casos, si no contaron con una buena relación con su suegra, repiten la historia y aquello que tanto les afecto, es lo que ellas mismas luego protagonizan con sus nueras, estas personas no sanaron sus heridas y no tomaron la experiencia como un aprendizaje sino que se endurecieron. Para sobrellevar esta situación los hijos deberían sugerir o buscarle a su padre o a su madre una actividad que complemente su vida, que le ocupe el tiempo, que le permita distraerse y crecer.

Hay hijos que se dejan manipular por sus madres porque sienten culpabilidad de estarle fallando. ¿Qué tan perjudicial puede ser esto?

Es muy doloroso que sean los padres quienes quieran manipular a sus hijos porque la manipulación es valerse de la vulnerabilidad de alguien para obtener algo. Si un padre se aprovecha del amor, respeto y debilidad, está destruyendo a su hijo dos veces, la primera porque lo hace dependiente y la segunda porque le crea sentimientos de culpa. Este tipo de padres le cuenta historias a sus hijos de todo lo que han sufrido en su vida, también responsabilizan a sus hijos del dolor que sienten bien porque no hicieron algo que quisieron o por el contrario, hicieron algo en el pasado y se los recuerdan a cada instante para que paguen esa deuda.

Un padre o una madre manipuladora destruye con ofensas, con comparaciones, descalifica, agrede física y verbalmente o simplemente finge enfermedades o tristeza. Para poner límite a esta situación es importante tener una autoestima fortalecida porque si alguien se valora no podrán fácilmente endosarle culpas, también quien tiene autoestima sabe que es merecedor de una vida feliz.

Es muy difícil alejarse de los padres, hay que convivir con ellos pese a su toxicidad. La pregunta es ¿debo alejarme de mi madre toxica?, en casos muy extremos pudiera ser una solución que les demuestre a ellos que así no se puede vivir, pero esto debe ser a corto plazo, te dará una felicidad temporal, porque llegará el momento en el que se extrañe a la madre o al padre.

Además gente tóxica la hay en todas partes, si la distancia fuese la solución tendríamos que desaparecernos del planeta, en el trabajo, en el hogar, en el supermercado, en cualquier lugar hay gente difícil, gente que no está en el lugar que quisiera estar y paga sus frustraciones hiriendo a los demás. Tampoco se trata de tratar de cambiarla o batallar. Se trata de poner cualquier situación negativa a nuestro favor, llenándonos de fortaleza, obteniendo el don de la templanza.

¿Existe la posibilidad de que una madre separada o viuda llegue a ver en su hijo la figura de ese hombre cabeza de familia que está ausente?

Sí, es muy común en madres que tienen que criar solas a sus hijos. La madre va dándole al hijo responsabilidades de padre y este termina sintiendo que debe hacer miles de cosas para llenar ese vacío. Este es el caso de hijos que llevan la carga de sus madres y de sus hermanos y cuando intentan tener una relación amorosa, la madre hace todo lo posible por evitarlo, por temor a perder la estabilidad económica que este les proporciona. También hay casos en los que a pesar de que el esposo está en casa la madre es quien manda y decide tanto por su esposo como por sus hijos. El resultado es que el hijo al ver el ejemplo del padre sumiso y dominado, siga los mismos pasos y le cueste salir de su hogar.

El apego es contrario al amor, es común confundirse y creer que se trata de lo mismo, pero es egoísmo. Cuando creemos que nuestra felicidad depende de otros estarán presente los celos y la obsesión, por eso debemos sanar carencias y buscar dentro de nosotros. Hay que tener claro que nada ni nadie nos pertenece y que la verdadera felicidad la vamos a encontrar cuando aprendamos a amar con libertad. El amor está ligado al respeto como valor supremo, es tiempo de salir del nido y a conectarte con tu ser, solo así podrás vincularte de manera sana con el otro.

¿Qué tipo de padres son los que están más propensos a tener ese comportamiento?
Aquellos padres que no se ocupan de su propia vida, los que tienen baja autoestima, los padres inseguros, sobreprotectores, dominantes, los que no desearon a sus hijos, los que no vivieron la vida que desearon vivir y por ende quieren hacer de la vida de sus hijos su historia, aquellas madres que el esposo le fue infiel y quieren curar su herida a través del hijo, por ejemplo, tú no te vayas, tu no me dejes. Las madres de hijos únicos, las que convirtieron los hijos en el centro de la relación, las madres que tienen preferencia por alguno de sus hijos, las madres viudas, divorciadas o madres solteras.

¿Qué lugar le dan las madres toxicas a sus esposos y que problemas podrían producir?
El problema sería que en lo que los hijos se vayan existirá una enorme distancia entre ellos dos. El síndrome del nido vacío es una sensación general de soledad que los padres pueden sentir cuando uno o más de sus hijos abandonan el hogar. Actúan como si ya nada tiene sentido y el esposo puede sentirse anulado.

¿Puede un matrimonio sobrevivir con una suegra tóxica?
Si, cuando hay madurez de parte de la pareja y no acepta malos comentarios, cuando se busca ayuda psicoterapéutica, cuando se mantienen al margen de la suegra tóxica, pero si la persona es débil y se deja llevar por lo que diga su madre es muy difícil que logre sobrevivir una relación.

¿Cuál debe ser la actitud correcta de los padres ante la elección matrimonial de sus hijos?
Respetarlos. Un padre puede aconsejar a sus hijos, pero no pretender tomar la decisión por ellos. En algunos países los padres eligen a la pareja de sus hijos, también hay los que exigen que sean de su mismo origen. Convivir por el resto de la vida con una persona que no se eligió por satisfacer a los padres es una tortura, que termina en infelicidad, depresión y hasta infidelidad. Todos deseamos estar junto a alguien que nos llene emocionalmente y no que nos hayan impuesto. Es lógico que los padres sufran al ver que su hijo o su hija están tomando un camino que no le conviene e intente a toda costa salvarlo, pero ante esa situación solo cabe el buen consejo, no la prohibición.

¿Cómo lidiar con una madre tóxica?
El hecho de que una madre tenga comportamientos tóxicos no significa que no ame a sus hijos. Sin embargo, los hijos tendrán que aprender a lidiar con este problema si quieren tener una vida independiente. ¿Cómo hacerlo?

Rompe el ciclo de la toxicidad. Cuando te percates de que tu madre muestra comportamientos controladores y manipuladores, ponle freno inmediatamente. Recuerda que para luego es tarde, lo mejor es detener el problema apenas surja. Hazle saber que eres lo suficientemente mayor como para tomar tus propias decisiones, que ella puede opinar pero jamás decidir por ti.
Marca límites. Establece cierta distancia, puede ser económica, emocional o comunicacional; la idea es que delimites un territorio propio en el que sólo tú tengas acceso. De esta manera, estarás bloqueando el exceso de control y la manipulación, le demostrarás que necesitas independencia y privacidad.
Aprende a reconocer la manipulación. Reconocer una humillación o el control excesivo es fácil pero cuando se trata de la manipulación las cosas se complican un poco ya que esta se suele enmascarar. El caso más típico es cuando la madre finge que está enferma cada vez que el hijo va a salir de casa en la noche o cuando le dice que va a vivir solo. Obviamente, para ponerle coto a estos comportamientos, tendrás que aprender a identificarlos.
Sé asertivo y fomenta la comunicación. Intenta abrir un espacio de comunicación asertivo donde expongas tus puntos de vista y deseos de una manera abierta. Después de todo, tu madre te quiere, el problema es que no sabe encauzar adecuadamente esa preocupación que siente por ti. Por tanto, explícale cómo te sientes y cómo te limitan sus comportamientos. Buscad la mejor solución para ambos.

En ocasiones las madres tóxicas proyectan en sus hijos los deseos incumplidos de su propio pasado, sin preguntar si quiera que es lo que ellos desean, sin darles opción a elegir, pensando que con ello, les demuestran un amor incondicional, cuando en realidad es un falso amor. Un amor interesado.

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