No permitas que las cosas de tu trabajo sean más difíciles de lo que tienen que ser. Solo deja que el tiempo fluya y las cosas sucedan.
Si piensas demasiado en tus tareas solo harás que las cosas sean más difíciles, más complejas y que no las puedas realizar a tiempo . Pero también si no te comprometes con tu trabajo no lograrás nada y también
harás las cosas más difíciles.
Simplemente determina que es “lo que se debe hacer” y hazlo . Ponte por encima de cualquier dificultad que puedas crear o encontrar, y concéntrate en sacar adelante tus tareas pendientes .
Haz las cosas con buena voluntad, con empeño, dando lo mejor de ti y haciendo las cosas lo mejor que puedas, siempre con buenas intenciones . Aprovecha esta gran oportunidad que te da Dios de sentirte una persona útil , de hacer que tu trabajo tenga sentido , y que puedas darle un valor agregado a tu vida ya la sociedad.
Deja de lado tus dudas, tus resentimientos, tus excusas y olvídate del perfeccionismo exagerado. Continúa concentrándote en las cosas realmente “importantes ” de tu trabajo, en lo que “si eres capaz” y “si puedes hacer”.
Haz lo que sea necesario para que tu esfuerzo valga la pena y represente algo positivo para ti.
Concéntrate en tu trabajo, vive en paz y armonía y obtendrás la satisfacción del deber cumplido .
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios