Según
una tradición que va de platón a Schopenhauer: La diferencia entre la genialidad y el talento no es
meramente cuantitativa sino cualitativa. No se trata solamente de hacer
más o percibir más, sino
de hacer de otra forma y percibir de otra forma. Existe una tradición
filosófica, que se remonta hasta Platón y que encuentra en Schopenhauer a un
cuidadoso continuador, que sostiene que la genialidad tiene que ver con percibir y hacer conocido lo eterno
y lo universal, y no meramente las relaciones temporales y los particulares.
La cualidad esencial, entonces, es la intuición (noesis), lo que Platón había
identificado con "el
ojo del alma". El
hombre de genio, por lo tanto, es sobre todo un contemplativo y no un hombre de
acción, si bien existieron hombres geniales como Goethe o Leonardo da
Vinci que por la inmensidad
de su espectro intelectual, fueron también muy activos.
En su
obra maestra, El mundo como voluntad y representación, Schopenhauer le dedica
un largo capítulo al genio. El filósofo, quien fuera ampliamente admirado por
pensadores como Nietzsche, Freud, Mann, Einstein, Borges, etc., distingue claramente entre el
talento y el genio: "Quien esta dotado de talento piensa con más rapidez y
corrección que los demás. En cambio, el genio intuye otro mundo que los demás,
si bien sólo en cuanto penetra con más profundidad el que se le ofrece a todos,
porque en su cabeza se presenta objetivamente, o sea, más nítida y
claramente". El
hombre de talento puede ser un ciudadano ilustre y alcanzar gran éxito
en el mundo pero estará limitado a lo particular y a lo utilitario; estará
regido por la voluntad, por el deseo de lograr algo; no tocará la eternidad,
las ideas: "Grande es
aquel que con su actividad, sea práctica o teórica, no va a lo suyo, sino que
únicamente persigue su fin objetivo... En cambio, es mezquino todo lo
que se orienta hacia fines personales". Aquí el filósofo coincide con la
distinción que hace Platón en La república entre el filósofo y el hombre que se
rige por la opinión (doxa, y por lo tanto vive en lo que podemos llamar, con
Schopenhauer, en la maya, en la ilusión), pues es el filósofo quien se relaciona puramente con el
conocimiento, sin ningún fin ulterior y quien accede al conocimiento de
las ideas o formas que son la realidad suprasensible, la cosa en sí
kantiana.
Schopenhauer señala que todas las
grandes obras de arte nacen de una idea intuitiva, lo cual es también una abnegación
del yo y la propia voluntad, pues
la voluntad es lo que mantiene al individuo existiendo dentro del mundo de la
necesidad, del cambio y de lo meramente relativo. En cierta forma el
artista o el filósofo que intuye las verdades universales deja de ser un
individuo por algunos momentos, convirtiéndose en el "sujeto
cognoscente", en el "gran ojo" del universo, un concepto muy
similar al Atman de las Upanishad, que fueron tan importantes en el pensamiento
de Schopenhauer. El genio
accede a lo objetivo o a lo universal participando directamente en la esencia
de las cosas a través del movimiento de negación de su voluntad, que va
de la mano de su intuición.
Aunque el genio es en gran medida quien
nace con una capacidad sobresaliente, quien está poseído por lo que los romanos
llamaban un genius
(algo similar al daimon de los griegos), Schopenhauer sugiere que la intuición puede desarrollarse
siguiendo una especie de ascetismo, de desinvolucrarse del mundo como
voluntad, de suspender la
aversión al dolor y la avidez, desarrollando un conocimiento
"avolitivo": "La
esencia del genio ha de radicar en la perfección y energía del conocimiento
intuitivo". Pero quien "quiere" perfeccionar su intuición
se enfrenta con una paradoja, pues ciertamente no se puede usar la voluntad para convertirse en un genio,
pues la genialidad radica en la anulación de la voluntad. Así, hay claramente
un cierto determinismo, tanto en el caso del genio como en el de la existencia
en general.
¿Es
posible convertirse en genio?
Convertirse en un "genio" depende de cómo
definas el término. Si lo entiendes como alguien con una inteligencia
excepcional o habilidades sobresalientes en un campo específico, es posible
acercarse a ese nivel con dedicación, estrategia y esfuerzo. Aquí hay algunas claves:
1.
Desarrollo
de habilidades:
o Enfoque: Elige un área específica y profundiza en
ella. La especialización suele ser clave para destacar.
o Práctica deliberada: No se trata solo de repetir,
sino de mejorar
activamente, identificando y corrigiendo errores.
2.
Mentalidad
de crecimiento:
o Aprende a ver los desafíos
como oportunidades para crecer.
o Sé persistente y no temas al
fracaso, ya que es parte del proceso.
3. Curiosidad y aprendizaje continuo:
o Mantén una mente abierta
y busca constantemente nuevos conocimientos.
o Lee, investiga y explora temas
fuera de tu zona de confort.
4. Creatividad e innovación:
o Practica el pensamiento crítico y busca soluciones originales a los problemas.
o Combina ideas de diferentes
disciplinas para generar nuevas perspectivas.
5.
Salud
y bienestar:
o Cuida tu salud física y
mental, ya que son fundamentales para el rendimiento cognitivo.
o Duerme bien, come
saludablemente y haz ejercicio regularmente.
6.
Mentores
y redes:
o Rodéate de personas que te
inspiren y te desafíen a mejorar.
o Busca mentores que puedan
guiarte en tu camino.
7. Pasión y dedicación:
o La mayoría de los genios
dedican miles de horas a su campo. La pasión es lo que te mantendrá motivado.
Recuerda que la inteligencia no es solo
innata; también se desarrolla. Incluso si no alcanzas el nivel de figuras
históricas como Einstein o Mozart, puedes lograr un dominio excepcional en tu
área si te lo propones. ¡El esfuerzo y la constancia son clave!
PODCASTS
P373 ¿CUAL ES LA DIFERENCIA ENTRE EL GENIO Y EL
TALENTO?
El talento se desarrolla con esfuerzo y práctica, mientras que el genio
surge de una creatividad y visión excepcionales que parecen únicas. Ambos son
valiosos y complementarios, mostrando que el éxito no solo depende de dones
innatos, sino también de dedicación y aprendizaje constante.
P373 WHAT IS THE DIFFERENCE BETWEEN GENIUS AND TALENT?
Talent is developed through effort and practice, while genius arises from
exceptional creativity and vision that seem unique. Both are valuable and
complementary, showing that success depends not only on innate gifts but also
on dedication and continuous learning.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios