Es normal que en una relación sientas
que el otro ya no es tu pareja, tu compañero, amigo y apoyo, y te das cuenta.
Darte cuenta puede ser más o menos
consciente. Es duro porque produce sensación
de irrealidad, miedo y frustración.
Analiza con serenidad algunas señales
claves de expertos
en orientación que distinguen a las parejas:
Unas solo necesitan trabajar sus
problemas, otras deben aprender a decirse
adiós con un “te quiero” y de modo responsable y en paz.
1. Se ha perdido la confianza mutua que nace de actuar con
honestidad y transparencia. Si eso no hay nada.
2. Se acabó el amor. A veces en realidad nunca se
dio y ambos llamaron amar al querer o al desearse y necesitarse.
3. La relación ya es tóxica, se agrede,
se ofende, se irrespeta,
pero siguen porque hay una codependencia malsana.
4. Uno de los dos o ambos no quieren
cambiar. Es puro
ego y se dice: “Yo estoy bien, no tengo problemas, cambia tu”.
5. Ya no se tienen los mismos planes de
vida. Ojo porque es
grave renunciar a tus sueños y seguir no es ser sincero con uno mismo.
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