La
novela de Albert Camus, “La peste” muestra del mejor modo la fragilidad del
hombre ante las enfermedades contagiosas.
Fue publicada en 1947, había acabado la
guerra, y él fue testigo
tanto de actitudes heroicas como miserables.
Transcurre en la ciudad de Orán donde se desata una epidemia,
transmitida por las ratas, que diezma a la población.
Estalla
el terror entre la gente, que intenta sobrevivir como puede, y algunos usan su poder y privilegios para evitar el contagio.
El doctor Bernard Rieux se queda en la ciudad
para luchar contra la enfermedad, arriesgando su vida. Al final se lee:
“Decir algo que se aprende en medio de las plagas: que hay en los humanos más cosas dignas de admiración que de desprecio”.
Son palabras del médico y protagonista Doctor
Rieux que se ha dedicado a
servir con humanismo y amor.
Para Camus la peste es un absurdo, algo sin sentido que al azar
mata a la gente y ante ella hay dos actitudes:
Actuar con dignidad o huir sin pensar en los demás.
Rieux es un médico que obra con responsabilidad y da un alto ejemplo
moral.
“Decir algo que se aprende en medio de las plagas: que hay en los humanos más cosas dignas de admiración que de desprecio”.
Actuar con dignidad o huir sin pensar en los demás.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios