Google Ads

TODO TIENE UN SENTIDO Y SUCEDE EN SU MOMENTO JUSTO

 

Todo lo que sucede en la vida, desde los sucesos más pequeños hasta los más significativos, tiene un propósito o una razón para ocurrir. La idea es que nada es por casualidad y que todo ocurre en el momento adecuado, sea bueno o malo.
 
Esta perspectiva puede ser reconfortante, especialmente en momentos difíciles, ya que permite ver las dificultades como parte de un plan más grande. También puede ayudar a enfocarse en el presente y a disfrutar más de la vida, ya que se cree que todo tiene un propósito en el momento justo.
 
Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta filosofía no justifica la injusticia o el sufrimiento, y que a veces las cosas suceden por circunstancias complejas y desafortunadas. La idea de que "todo tiene un sentido" puede ser una forma de enfrentar y comprender los desafíos de la vida, pero no debe ser utilizada como una excusa para no buscar soluciones o ayuda cuando sea necesario.
 
 
REFLEXION
 
Muchas personas espirituales afirman que no hay coincidencias ni accidentes, hay diosidencias y aprendizajes.
Jung también hablaba de sincronicidad y seguramente lo has comprobado en tu vida en hechos como éste: En el instante que estás pensando en alguien, esa persona te llama, o más tarde dice que a esa hora estaba en peligro.
La verdad es que todo tiene un sentido y sucede en su momento justo, ni antes, ni después.
Evoquemos, por ejemplo, al radioperador del barco Carpathia que navega a 58 millas del Titanic.
Ya ha terminado su turno, pero siente que debe quedarse más tiempo y entonces recibe un SOS que salva 700 vidas.
¿Es casual? No, y tampoco lo es un naufragio que cambia normas internacionales para evitar más desastres.
 
 Todo está en un plan divino, aunque algunos lo duden.
Todo el universo se confabula para ayudarte cuando te enamoras de una misión.
 
Todo sucede para el bien.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Por favor, escriba aquí sus comentarios

Gracias por su visita.

EnPazyArmonia