A pesar de todos los
“males” actuales la vida no era mejor en tiempos prehistóricos, en Roma o hace
cincuenta años.
Si nos enfocamos solo en la mortalidad basta con citar unos casos que en
tiempos remotos eran el pan de cada día:
- La mamá de Beethoven tuvo siete hijos, pero solo tres de ellos sobrevivieron.
- Bach tuvo 17 hijos en dos matrimonios y afrontó el dolor de enterrar a 13 de ellos. El pintor Rembrandt tuvo seis hijos y enterró a cinco y también a sus dos esposas.
- La mamá de Beethoven tuvo siete hijos, pero solo tres de ellos sobrevivieron.
- Bach tuvo 17 hijos en dos matrimonios y afrontó el dolor de enterrar a 13 de ellos. El pintor Rembrandt tuvo seis hijos y enterró a cinco y también a sus dos esposas.
La verdad es que la
vida hoy es mejor, sin negar tantas cosas negativas que aún nos perturban y
aquejan.
Nada ganamos siendo
pesimistas cuando el reto es dedicarnos a construir un mundo mejor y apostarle a
la esperanza.
Da lo mejor para que subamos
a un estado superior de consciencia, a fluir solo en el amor y ser
transparentes.
Hay un despertar de
conciencia y millones son más espirituales y mejores personas. Sé tú un faro,
unido al Padre y los seres de luz.
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