Pasión
es la fuerza que mueve a los grandes seres, a los que dejan obras maravillosas
y son héroes con su actuar.
La pasión movió a Cristóbal Colón y a
Magallanes para hacer sus viajes y superar mil peripecias sin desfallecer.
Con pasión Bach, Handel, Haydin, Beethoven,
Mozart o Ravel compusieron sus obras inmortales, superando serios escollos.
Pasión
es esa energía que despliegan las buenas madres con sus hijos una y otra vez,
incluso enfermas o fatigadas.
Pasión
es ese motor que mueve a los hinchas de un equipo o que
lleva a otros a escalar la cumbre del Everest.
Esa pasión crece cuando te amas, amas lo que haces, das lo mejor de ti y con un firme compromiso dominas las dudas y el cansancio.
Los mejores deportistas y atletas son seres
apasionados, tanto, que a veces siguen jugando incluso estando con una lesión.
Mira
qué quieres hacer para mantener vivo el fuego de la pasión en el amor, el
trabajo y la fe. Sin pasión estás muerto en vida.
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