Cuentan
que en las paredes de un monasterio medieval se leen estas sabias palabras:
"El amor acompaña e inspira a los que aceptan la realidad y la naturaleza
humana tal como son".
Es cierto, cuando eres tolerante y
comprensivo estás en paz y
armonía lejos de vanos conflictos, alejas la ira y no tienes un corazón
atribulado.
Siempre obtienes buenos resultados cuando ves la realidad con
amor y valoras otros puntos de vista.
Ganas mucho con la empatía, cuando no te alteras con las
fallas y eres afable y bondadoso.
Ser comprensivo no es reprimir tus emociones negativas, es
liberarlas sin lastimarte y sin hacer daño a otros.
Según el doctor Redford Wlliams de la
Universidad de Duque en EE.
UU. el reto es relajarse y fluir en el amor:
"Todo marcha bien con un corazón sereno y la decisión de cambiar la ira por actitudes amorosas".
UU. el reto es relajarse y fluir en el amor:
"Todo marcha bien con un corazón sereno y la decisión de cambiar la ira por actitudes amorosas".
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