Examina con frecuencia tu obrar porque es fácil desviarse del buen
camino.
Elige amar en lugar de odiar, elige elogiar en lugar de
criticar, elige comprender
en lugar de juzgar. Elige
darte y dar, pero
aprende a recibir; elige
unir en lugar de enfrentar, elige actuar en lugar de aplazar.
Tu principal actividad debe ser amarte y amar,
pero el amor implica practicar
los más altos valores: Aceptación, respeto, admiración, honestidad, confianza, perdón
tolerancia, generosidad, compromiso, paciencia, fidelidad, ternura.
Tienes dos grandes enemigos: la inconsciencia y el desamor; tienes dos alas para volar: el amor y la honestidad. En la vida no hay problemas, hay aprendizajes,
aunque te veas como bueno, ya que sin exigencia no se toma consciencia.
Lo que llamas negativo es tan necesario
como el fuego para pulir los metales o como los obstáculos en cualquier
deporte. El agua es el
elemento más importante para la vida; en algunos organismos, casi el 90%
del peso corporal es agua. El cuerpo humano está compuesto en un 60% de agua, el cerebro se compone en un 70%
de agua. La sangre tan valiosa para la vida es agua en un 80% y los pulmones se componen en un
90% también de agua.
Casi el 99% de la masa de tu cuerpo la forman 6 elementos: oxígeno,
el más presente, y carbono,
hidrógeno, nitrógeno, calcio y fósforo. Solo un 0,85% está compuesto por
cinco elementos más: potasio, azufre, sodio, cloro y magnesio.
Los 11 son necesarios para la vida. Cuando
te amas le das a tu maravilloso cuerpo estos cuatro regalos: buen sueño, buena
dieta, buena sexualidad y ejercicio regular. Si te amas de verdad no deterioras
tu organismo con estos cuatro enemigos: licor en exceso, drogas, cigarrillo y
estrés. Todo eso enferma tu cuerpo y le hace tanto daño como estas emociones:
tristezas sin fin, odio, culpas, rabias, miedos, apegos y envidia.
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