Miremos con atencion lo que nos dice la biblia:
Levítico
11,7 También el cerdo, porque tiene pezuñas, y es de pezuñas hendidas, pero no
rumia, lo tendréis por inmundo.
Una explicación antropológica (materialismo cultural) es que el cerdo en oriente
próximo no es adaptativo para los grupos humanos: necesita bastante agua y no
puede pastar, compitiendo con los seres humanos por la misma comida
(aunque se le den las sobras)
El
resultado es que, con los siglos, el cerdo es para los judíos y musulmanes
practicantes un animal sucio y contaminante. A muchos les da asco
simplemente pensar en comer cerdo. No es como el vino, que para los musulmanes
está prohibido. El vino es pecado, el cerdo es impuro.
Los judíos y musulmanes secularizados tienen menos o
incluso ningún problema en comer cerdo
Musulmanes
Porque lo ordenan la ley judía (torá) y el corán.
Muchas de las leyes que figuran en el tanaj, o antiguo
testamento; particularmente aquellas en el torá (pentateuco) son
formalizaciones del conocimiento general que existía en los pueblos del medio
oriente. Uno de esos conocimientos fue haber observado que alimentarse de
ciertos animales podía causar enfermedades.
Estos animales, por tanto, fueron considerados sucios y
no aptos para ser consumidos. Además del cerdo incluye, por ejemplo, los
mariscos, o los perros, o cualquier animal que se haya visto alimentando de
cuerpos humanos. También se prohíbe el consumo de animales limpios que no hayan
sido sacrificados de formas correctas.
Por mucho que haya imprecisiones científicas en los
textos sagrados, las personas que los escribieron no eran tontos. Podrían no
saber sobre la triquinosis, pero sí observaban que personas que comían animales
carroñeros podían enfermarse más fácil, en una época donde las enfermedades
eran atribuidas a castigos divinos. Estas prohibiciones (y otras leyes) tampoco eran exclusivas de los
judíos sino que eran compartidas por otras tribus y sectas en la región.
El
islam nació en pueblos semíticos (igual que los hebreos) en una región donde
vivían grupos de judíos. La prohibición de comer ciertos animales bien pudo deberse a un tabú
común o a influencias de las leyes judías.
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