1- Aprenda a diferenciar los espacios. Los problemas personales déjelos
en su hogar.
2- Su vida privada no debe ser un tema en su trabajo, protéjala lo más que pueda.
3- Respete la autoridad que representa el jefe en su
trabajo. En lo posible no
intente llevarle la contraria, sino que por el contrario potencie la
empatía más allá de lo laboral.
4- No
crea tener siempre la razón, aprenda a escuchar lo que otras personas opinan o piensan, es
fundamental para mejorar su crecimiento personal.
5- Programe actividades con familiares y/o amigos que le permitan liberar un poco
el estrés que implican las horas de trabajo.
6- Disfrute
el trabajo que realiza, esto le hará verlo más fácil y por ende será más
productivo.
7- Controle
sus pensamientos negativos. En la medida de lo posible, evite
situaciones desagradables en su casa y en el trabajo.
Otras claves:
Organización:
Es importante tener un sistema para organizar tus tareas y responsabilidades,
ya sea mediante el uso de un calendario, una lista de tareas o una combinación
de ambos. Esto te ayudará a mantener el control y a no olvidar tareas
importantes.
Priorización:
Una vez que hayas organizado tus tareas, es importante priorizarlas en función
de su importancia y urgencia. Esto te ayudará a concentrarte en las tareas más
importantes primero, lo cual te permitirá cumplir tus metas y objetivos a
tiempo.
Comunicación
efectiva: Es importante establecer una comunicación clara y efectiva con tus
compañeros de trabajo y superiores. Esto incluye ser proactivo y ofrecer
actualizaciones regulares sobre tus proyectos y tareas, así como escuchar
activamente a los demás y responder a sus preguntas y preocupaciones.
Adaptabilidad:
Es importante ser adaptable en el trabajo y estar dispuesto a enfrentar nuevos
desafíos y situaciones imprevistas. Esto implica ser capaz de adaptarse a los
cambios, tanto en el trabajo en sí mismo como en las expectativas y objetivos
de la empresa.
Aprendizaje
continuo: Es importante estar dispuesto a aprender y a mejorar constantemente
en el trabajo. Esto implica estar abierto a la retroalimentación y a los
cambios, así como a estar al tanto de las tendencias y novedades en tu campo.
Resiliencia:
Es importante ser resiliente en el trabajo y ser capaz de hacer frente a los
obstáculos y dificultades. Esto implica mantener una actitud positiva, buscar
apoyo en otros, y desarrollar estrategias para manejar el estrés y la presión.
Equilibrio:
Es importante encontrar un equilibrio entre el trabajo y la vida personal. Es
importante tener tiempo para relajarse y disfrutar de tus intereses y
pasatiempos fuera del trabajo, para poder mantener una perspectiva saludable y
para evitar el agotamiento.
En
general, es importante ser proactivo en el trabajo, comunicarse de manera
efectiva y ser adaptable y flexible. La capacidad de priorizar, aprender
continuamente y mantener un equilibrio entre trabajo y vida personal son
también claves para hacer frente al trabajo de manera
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