El mundo cambia en muchas
cosas y en otras parece que vagara en círculos o no progresara, pero marcha
como debe ser.
Por ejemplo analiza la letra de una vieja balada que hace años fue un gran éxito: Soy rebelde. La canta Jeanette y la letra la compuso nada menos que Manuel Alejandro, el mismo de los éxitos de Rafael.
Para tantos jóvenes incomprendidos esa letra sigue hoy tan vigente como hace años y dice así:
“Yo soy rebelde porque el mundo me ha hecho así, porque nadie me ha tratado con amor, porque nadie me ha querido nunca oír.
Yo soy rebelde porque siempre, sin razón, me negaron todo aquello que pedí y me dieron solamente incomprensión”.
Si tú hijo es rebelde, examina tu capacidad de amar y, sin culparte, busca guía para mejorar como padre o madre.
Casi siempre la rebeldía es el desahogo de su descontento o sus vacíos.
Llama la atención obrando mal, pero buscando amor.
Por ejemplo analiza la letra de una vieja balada que hace años fue un gran éxito: Soy rebelde. La canta Jeanette y la letra la compuso nada menos que Manuel Alejandro, el mismo de los éxitos de Rafael.
Para tantos jóvenes incomprendidos esa letra sigue hoy tan vigente como hace años y dice así:
“Yo soy rebelde porque el mundo me ha hecho así, porque nadie me ha tratado con amor, porque nadie me ha querido nunca oír.
Yo soy rebelde porque siempre, sin razón, me negaron todo aquello que pedí y me dieron solamente incomprensión”.
Si tú hijo es rebelde, examina tu capacidad de amar y, sin culparte, busca guía para mejorar como padre o madre.
Casi siempre la rebeldía es el desahogo de su descontento o sus vacíos.
Llama la atención obrando mal, pero buscando amor.
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