DALE PODER A LAS PEQUEÑAS COSAS

 

Piensa en esas pequeñas tareas que haces en forma rutinaria, y verás que pueden llegar a ser más importantes que los grandes proyectos que haces ocasionalmente. Reflexiona sobre esos pequeños detalles de la vida que se presentan a tu alrededor y pronto descubrirás el gran valor que tienen y lo importantes que son para tu vida.
 
Ser “un poco más amable con los demás” es algo simple y siempre tienes la oportunidad de hacerlo. Hazlo mil veces y cambiarás tu vida, y también la vida de los demás, y contribuirás a construir un mundo mejor.
 
Las pequeñas cosas son simples, fáciles, repetibles y siempre están al alcance de tus posibilidades. Esas pequeñas cosas cuando se repiten con frecuencia, son las que te dan satisfacción y te permiten que puedas vivir en paz y armonía.
 
Estos pequeños detalles nos muestran una forma diferente de actuar donde se requieren pocos recursos y poca planeación.
 
Entre más “pequeñas buenas acciones” hagas, más satisfacción experimentarás y más valor le darás a tu vida.
 
Mira a su alrededor con amabilidad, respeto, comprensión y buen ánimo y fíjate en todas las pequeñas buenas acciones puedes hacer hoy.
 
Recuerda lo importante que es para ti buscar esos pequeños detalles que te llevan a realizar buenas acciones. Mira cómo tu vida se va enriqueciendo y le vas dando sentido minuto a minuto.
Y que Dios te ilumine.