TAREAS PARA UN JUBILADO

Primera tarea es hacerse una limpieza al disco duro que se ha cargado en su cabeza toda una vida con impurezas y resabios.

Hay que descargar de la memoria todo lo banal y todo lo efímero que acumulas en el fólder de lo urgente. ¿Esto para que?,  ¿Y a mí para qué?.

Hay que aprender a olvidar y borrar de la memoria de todos los nombres y alias, de las personas y procesos que hacían parte del día a día de su antiguo trabajo.

A esa desintoxicación hay que agregarle el acabar con las costumbres que regían su vida. Es hora de elaborar un nuevo manual de convivencia con su pareja para que queden claros los nuevos deberes y responsabilidades de la vida en pareja, respetando los espacios que ahora requieren como jubilados sin que la permanencia en casa vaya a convertirse en una pesadilla.

Ya nada es urgente.

Hay que sacar tiempo para desempolvar a Mozart y todas las bandas sonoras por las que se siente nostalgia. Es el tiempo para hacer una buena colección de música en su computador.

Poco a poco se irá recuperando y adaptando a la nueva vida.

Ahora viene el cambio del reloj biológico. Puede ir olvidándose del despertador que ya no requiere.

Hasta el reloj de pulso lo puede dejar porque da lo mismo las once que las dos y lo mismo si es jueves que el lunes.

Ya puede iniciar la profesión de caminante e ir a aquel cerro o parque a contemplar al atardecer o madrugar a ver el amanecer. Y si le gusta consígase un perro que lo acompañe y le sirva como mascota.

Viene la nueva profesión de caminante: Se puede ir todo un día al jardín botánico o a descansar a la playa o de sentarse una tarde entera en un balcón con la esposa y los amigos a escuchar las historias tomando una copa de vino o una cerveza.

Ya puede comenzar a regalar todos los sacos y corbatas (Debe dejar al menos uno para eventos especiales).

Es la hora de recuperar los deseos perdidos, los sueños no realizados y las esperanzas de hacer lo que quiera, a la hora que quiera.

Es hora de reinventar la vida mientras llegan los achaques y la falta de energía.

Está por quemar el último cartucho, sacar todos los ímpetus y las ganas reprimidas de hacer de todo. Es hora de despertar las neuronas para darse esta segunda oportunidad.

Ahora si pasas a ser “nadie” y estás lejos del reconocimiento profesional y económico. Solo resta esperar que llegue la hora de “colgar los guayos” lo que motiva a aprovechar muy bien el tiempo.

Solo tienes esta oportunidad tan esperada para hacer todo aquello que había diseñado. Disfrutar de los olores de la cocina, de aprender a cocinar, a escribir lo que quiera,  a aprender lo que quiera y a disfrutar tu familia, tus hijos y si eses mas afortunado a los nietos que son el postre del matrimonio.

Es la última oportunidad de ir a los bares o de convertirse en Barman. De verse por TV todos los programas de Discovery, los torneos de tenis y futbol y las carreras de autos, de leer libros que nunca ha tenido tiempo y de saborear la buena música y la poesía.

Es tiempo de instalar un par de hamacas en la casa.

Es el tiempo de recuperar viejas amistades

La mente tiene que estar activa.

Pero tómelo suave, esta es la hora del último recreo. El más soñado.

Si estaba planeando el momento supongo que podrá asumir la profesión de turista y hacer un viaje de verdadero descanso y sin afanes a uno de los siguientes lugares:

-       Cartagena (Colombia)

-       Rio de Janeiro, Iguazú, Buenos Aires, Santiago de Chile, Patagonia.

-       Miami y Orlando en USA

-       España.

No está demás hacerse un chequeo médico para asegurar la salud en estos últimos años.

Luego vendrá la vejez que por lo general viene acompañada de soledad, enfermedad y pobreza, pero usted se ha preparado mentalmente para esta etapa del camino y ha soñado con vivir este momento plenamente para que esta nueva etapa de jubilado sea aprovechada y disfrutada como lo dice su nombre… Con Júblio.

Es el tiempo de disfrutar la familia y de recuperar el tiempo perdido con ellos porque son el mayor tesoro del mundo.