Imagina el paso del tiempo como si fuera una línea
contínua que se extiende hacia adelante.
La técnica “No
rompas la cadena” consiste únicamente en
3 pasos:
1. Elige una tarea que quieras empezar a realizar de
manera constante. Por ejemplo
estudiar 1 hora al día o salir a correr 30 minutos todos los días.
2. Utiliza un calendario. Debes colocarlo en un lugar visible y marcar con una X cada día que
hayas cumplido tu tarea.
3. La sucesión de X forman una cadena. Tu única misión consiste en no romper esta
cadena. Si te saltas un día la cadena se rompe.
¿Fácil verdad?
Conforme va aumentando la extensión de la cadena, tu
deseo por prolongarla aumenta.
Cada X que añades a la cadena intensifica la pena que sentirías en caso de
romperla. Como
consecuencia se incrementa tu motivación por continuarla.
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¿Porqué funciona
esta técnica?
Una misma acción repetida en el tiempo acaba por
convertirse en un hábito.
Cuando interiorizas un hábito te resulta más fácil seguir realizándolo cada
día. Muchas veces no somos
conscientes del grado de consolidación que se está produciendo en nuestro
hábito.
Sin embargo si
colocamos una cadena
visible en algún lugar de nuestro hogar, podremos ver de manera clara
cómo va creciendo nuestro hábito. Sentimos como vamos construyendo nuestro hábito cada día.
Creo que muchas personas somos resistentes al éxito. Comenzamos a hacer algo y en el último
momento, cuando ya casi lo hemos conseguido, nos echamos atrás. Rompemos el
hábito justo en el momento antes de consolidarse.
Quizá se trate de miedo a la responsabilidad o al cambio. Inconscientemente nos saboteamos y nos
ponemos multitud de excusas y justificaciones para haberlo hecho. Excusas del
tipo “estoy perdiendo el tiempo” “no lo estoy haciendo lo suficientemente bien” “no voy a llegar a ningún
lado” y un largo etcétera.
Estas excusas se
hacen más pequeñas cuando visualizamos la cadena. Los miedos pueden seguir ahí. Sin embargo la
extensión de la cadena te demuestra que te estás esforzando cada día en
conseguir aquello que persigues. Basta de excusas.
Y para finalizar
una frase de la película “El caballero oscuro”: La noche es más oscura justo antes del amanecer
Piensa
en el amanecer como en la consolidación del hábito. El momento de mayor oscuridad son tus dudas justo
antes de que se haya consolidado.
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