Hoy
elijo hacer todo con amor, irradiar luz y actuar como un instrumento de paz y
armonía.
Soy
un conciliador y renuncio a imponer mis ideas provocando conflictos
y discordias.
Me
amo y puedo sostener mis principios sin caer en la
intolerancia y el fanatismo, sin manipular ni dejarme manipular.
Hoy abro las puertas a la inocencia del niño, la
prudencia del anciano, el coraje del aventurero y la paciencia del pescador.
Quiero
actuar siempre con discernimiento y tener un corazón abierto y una mente creativa.
Tengo fe, pero no alimento fantasías destructoras ni espero
conquistar las cumbres fácilmente.
Con
Dios soy capaz de adaptarme a las circunstancias
y soportar las penas sin flaquear.
No cargo las cruces de otros, acepto mi proceso en paz y
armonía y avanzo lleno de confianza y fortaleza.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios