Si
puedes apreciar el milagro que encierra una sola flor, tu vida entera cambiará.
Si
quieres aprender, enseña. Si necesitas inspiración, motiva a otros. Si estás
triste, anima a alguien.
Si
tiene solución, ¿Has de llorar? Si no tiene solución, ¿Has de llorar?
Sin salud la vida no es vida; solo es un estado de
languidez y sufrimiento, una imagen de la muerte.
Solo hay dos errores que se cometen en el camino a la
verdad: No empezar, y no llegar hasta el final.
Solo
puedes perder a lo que estás aferrado.
Solo una madre protegería a su único hijo con su vida,
así uno debe cultivar un amor ilimitado hacia todos los seres.
Somos
creados por nuestros pensamientos, también nos convertimos en lo que pensamos.
Así que cuando la mente es pura, ella sigue la felicidad como sombra que jamás
se va.
Ten
paciencia. Espera hasta que el barro se asiente y el agua esté clara. Permanece inmóvil hasta que la
acción correcta surja por sí misma.
Tener el cuerpo siempre sano es un deber, de lo contrario
nunca serás capaz de tener la mente clara y fuerte.
Todo
lo que somos es el resultado de lo que hemos pensado.
Todo tiene un inicio y un fin. Haz las paces con eso y
todo estará bien.
Todos los actos incorrectos vienen de la mente. Si la
mente cambia, ¿cómo podrían permanecer esos actos?
Tu
deber es descubrir tu mundo y después entrégate a él con todo tu corazón.
Tu virtud debe ser profesar amor y paz a aquellos que te
rodean.
Uno mismo hace el mal, uno mismo lo sufre; uno mismo se
aparta del mal, uno mismo se purifica. Pureza e impureza son cosas de uno mismo, nadie puede
purificar a otro.
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