1. Importancia. Los abuelos son el apoyo más importante con
que cuentan sus hijos como padres. Las cualidades tan especiales que los
caracterizan –benevolencia, tolerancia, generosidad, desprendimiento,
sabiduría– son fruto de la experiencia y madurez con que los bendicen los años,
y por eso mismo son personas muy valiosas para la vida de sus nietos.
2. La clave. Los abuelos deben actuar como asesores y no como supervisores
de sus hijos cuando se precise su asesoría en cualquier asunto
relacionado con sus nietos.
3. Sin juicios. Deben contribuir a buscar soluciones sin ocuparse en
encontrar culpables frente a las dificultades o problemas en la familia
de sus hijos.
4. Apoyar. Recordar que sus hijos necesitan apoyo, no críticas sobre su
desempeño como padres ni instrucciones sobre cómo deben hacer las cosas.
5. Conciliar. Servir como conciliadores, no como abogados defensores de
los nietos, en los conflictos entre padres e hijos.
6. Cumplir las normas. Respetar las disposiciones de sus hijos como padres
y nunca darles o permitirles a los nietos ninguna cosa o privilegio que sus
padres les prohíban o consideren que no deben dárseles.
7.
No imponer. Ofrecer su colaboración cuando consideren que se necesite, sin tratar de imponer su forma de hacer o de ver las cosas.
8. Sin defender. Nunca intervenir a favor de sus nietos y en contra
de las decisiones o normas establecidas por sus hijos, nueras o yernos.
9. Cuidar la pareja. Promover la unión en el matrimonio de sus hijos
y evitar cualquier cosa que pueda causar conflictos o indisponerlos como
pareja.
10.
Ser feliz. Disfrutar el hecho de ser abuelo para compartir con los nietos
momentos únicos de la vida.
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