No sé si aún me recuerdas, pero yo jamás te
he olvidado. Nos conocimos en un momento mágico, donde tú, el mar y el cielo
se entrelazaban. Esa conexión fue única, y aunque solo fue el primero de muchos
abrazos, lo guardo como un tesoro en mi corazón.
Si pudiera volver a nacer, te vería amanecer
cada día, con esa sonrisa que ilumina todo. Quiero escribirte la canción
más bonita del mundo, capturando nuestra historia en solo un segundo. Porque
aunque hayan pasado más de cincuenta veranos, el eco de nuestra risa aún
resuena en mis recuerdos.
El día de la despedida, te hice una promesa: volver
a verte así. A veces siento que el tiempo es solo un juego, pero por
mucho que pasen los años, este loco de poco se olvida de lo que significas. Cada
momento que compartimos, cada rayo de sol en esa playa, sigue vivo en mí.
Así que
aquí estoy, decidido a escribir la canción más bonita del mundo. Porque
sé que un día verás que esta locura de amor perdura, sin importar el tiempo ni
la distancia. Por mucho
que pasen los años,
siempre estarás en mi corazón, y eso nunca cambiará.

No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios