Aprovecha el día, o disfruta el momento, son traducciones de la frase
latina “Carpe diem”
del poeta romano Horacio.
“Sin duda, el carpe diem es una de las
cimas del espíritu.
Suena como un delicado acorde musical.
En él confluyen el placer de los
sentidos, la armonía espiritual, el fluir del tiempo y la aceptación estoica de lo inevitable.
De este manantial de aguas tan claras
han bebido todos los sabios,
ascetas o epicúreos”. Manuel Vicent, escritor español.
El tiempo
corre como meteoro y es fácil no estar presentes en un mundo tan acelerado y estruendoso.
Millones viven en automático, con poca
conciencia y bastante ansiedad,
escaso amor y muchas
posesiones.
Carpe diem: Disfruta el sol o la
lluvia, saborea cada bocado, da gracias por respirar, admira todo lo hermoso.
Carpe
diem: Ama ya, mejora ya,
vive ya. No sabes si tú o los que aman estarán mañana acá. Puedes morir
esta noche.
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