Un
águila en vuelo sabe cuándo una tormenta se acerca y se eleva más alto para
capotear los vientos que vendrán.
Cuando azota la tormenta, ubica sus alas de modo que el
viento la lleve por encima de la tormenta.
Mientras la tormenta puede causar
estragos abajo, el águila
vuela confiada por encima de ella.
El
águila no se escapa de la tormenta, simplemente la aprovecha para
levantarse más alto y protegerse.
Tú puedes hacer algo similar cuando las
tormentas de vida te desubican, puedes elevarte con la energía del amor y la fe y estar con Dios.
Confía,
serénate y dejar que el poder de Dios te levante por encima de todos los males
y los infortunios.
"Los
que esperan en el Señor tendrán nuevas fuerzas;
levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no
se fatigarán". Isaías 40:31
Todo
llega para el bien, aunque lo veas como "malo", ten fe
y aprende del enfermo sereno o del lisiado feliz. Lee el libro El sentido de la
vida.
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