Google Ads

ERRORES HUMANOS Y VERDADES QUE DUELEN MÁS QUE EL SILENCIO.

 

No vengo a pedir perdón,

ni a esconder las lágrimas que alguna vez vertí

jurándote que no volvería a fallar.

Tampoco busco que calles

ni que encierres tu dolor en una sonrisa fingida.

Solo vengo a decir que te amo…

sin condiciones, sin excusas,

y que el resto, lo decida Dios.

 

Ya no te pido que creas,

porque la fe se quiebra donde el alma se rompe.

Y el pasado, amor,

no se borra con promesas ni se enmienda con palabras.

No pretendo que olvides,

ni que finjas que nada pasó…

Sé que aquella noche cambié la historia.

 

Fue una noche de copas,

una noche donde me perdí

en unos besos que no sabían a ti,

en una boca que no tenía tu voz.

Y en ese instante de locura y dolor,

te traicioné…

no solo a ti, también a mí.

 

No me excuso, pero sí te confieso:

tú estabas tan lejos

y yo tan rota…

Y aunque nunca antes te había fallado,

esa noche fui débil.

No por amor, sino por rabia,

por esa absurda venganza que no sana,

que solo destruye.

 

Hoy sé que fue una torpeza,

que me manché yo sola,

que te herí sin medida

por un momento que no valió nada.

Y aun así, te quise,

te quiero…

aunque tal vez ya no importe.

 

¿Podrás tú, amor,

olvidar lo que yo no puedo borrar?

No te pido que regreses,

solo que no me lleves en tu corazón como herida.

 

Porque sí…

fue una noche de copas,

una noche loca,

y esa…

esa es la historia.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Por favor, escriba aquí sus comentarios

Gracias por su visita.

EnPazyArmonia