Espera...
no tomes aún la salida,
no condenes al olvido lo
que una vez nos hizo eternos.
No dejes que lo nuestro
se hunda sin luchar en el
naufragio del silencio.
Por nuestro ayer, por cada
promesa,
por cada mirada que aún nos
tiembla dentro…
yo te lo pido:
espera.
Aún tengo en mis manos primaveras intactas,
llenas de caricias que no han florecido,
besos nuevos, inexplorados,
risas que solo quieren
nacer contigo.
No te vayas…
morirían entre mis dedos
esas alegrías que solo tú
puedes despertar.
Espera un poco, un poquito más…
no por mí,
sino por todo lo que aún no
ha vivido este amor.
Dame tan solo un suspiro
más de tiempo
para entregarte lo que
guardo en el alma.
Me moriría si te vas…
no de cuerpo, pero sí de
sueños.
Aún tengo mil noches de
amor sin estrenar,
una vida entera que quiero
gastar solo en ti.
No entendería mis mañanas sin tu voz,
sin tu caos, sin tu calma…
Y sí, te confieso:
te adoraría incluso si
fingieras amarme.
Te amaría aun sabiendo que
no me amas.
Porque a veces el amor
verdadero no exige condiciones,
sólo suplica una
oportunidad.
Una más.
Así que…
espera un poco, un poquito
más.
Porque si te vas,
te llevas mi felicidad.

No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios