Los demás te tratarán de la misma manera que tú los
tratas a ellos.
Lo mismo que damos es lo que recibimos. Y acá no cuentan solamente las palabras que digas, sino muchas otras cosas.
Lo mismo que damos es lo que recibimos. Y acá no cuentan solamente las palabras que digas, sino muchas otras cosas.
Existe un
lenguaje que no es verbal, sino corporal. La expresión de la cara es muy
importante en este lenguaje, la postura del cuerpo, la forma como saludas, la
forma en que lo dices y tu expresión facial.
Lo que dices sin hablar puede contrarrestar
completamente las palabras que pronuncias.
La actitud revela más que las palabras, y la gente lo que percibe es la actitud y no las palabras.
La actitud revela más que las palabras, y la gente lo que percibe es la actitud y no las palabras.
El lenguaje
corporal es inconsciente en la mayoría de las personas, ya que sólo a través
del entrenamiento se consigue controlar tanto el lenguaje hablado como el
lenguaje corporal.
Por lo tanto, para evitar que los demás te traten
con hostilidad, lo primero que tienes que hacer es eliminar la hostilidad
dentro de ti mismo, porque, aunque quieras disfrazarla con bonitas palabras, la
gente hará caso a lo que realmente sientes y que se percibe a través de tu
lenguaje corporal. Y si lo que perciben es hostilidad, entonces es hostilidad
lo que vas a recibir a cambio.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios