Lo primero que debes tener claro es que el hombre que te merezca te lo
hará saber sin que tengas que estresarte sobre si funcionará o no. No
hay razón por la cual debas poner tu el 70% y él el resto del esfuerzo. Hacerte valorar es lo que hará
que encuentres al indicado.
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Nunca subestimes la importancia de ‘ser interesante’: Los
hombres quieren algo interesante, ¡de verdad lo quieren! La persona más importante en tu
vida debes ser tú misma. Es vital que te intereses en ti, en adquirir
conocimiento, en verte radiante; muy pronto empezarás a recordar que bien se
siente. Te impresionará cuánto atraes cuando te sientes bien contigo misma y lo
reflejas al mundo.
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Hay una delgada línea entre hacer bromas a un hombre y molestarlo: este hábito no tiene nada de divertido, por lo menos para ellos, y
menos cuando no sabes de límites y terminas por ofenderlo con tu ‘broma
inocente’. Hay algo que, por si no lo sabias, molesta mucho a los hombres y es que intentes burlarte de él
siendo chistosita. Si consideras esta una estrategia para conquistarlo,
¡olvídate de la idea! Lo
único que lograrás es alejarlo.
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Tus necesidades son tan importantes como las de él: Jugar
el papel de la diva o el de plebeya, es un error en ambos casos. No es
necesario que, por el hecho de ser la mujer, pienses que todo debe centrarse en
ti y en tus necesidades. Tener en cuenta lo que él piensa y sus sentimientos te
dará puntos extra. Lo que no queremos es que te vayas al extremo de convertirte casi en la
cumplidora de sus deseos y caprichos, y cada vez que levante la mano
corras a atenderlo. Hay que mantener
un balance y priorizar necesidades de los dos.
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Saber cocinar es un punto extra: y es que el viejo refrán
de la abuela de que ‘a los hombres se les conquista por la barriga’ algo de
cierto tiene que tener... los
hombres aman que les cocinen, atiendan y reatiendan. Si sabes cocinar no
dudes en invitar a tu cita a una noche culinaria, sorprenderlo con un plato delicioso lo dejará con
la barriga contenta y se le saldrán las babas por ti.
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Los hombres son coquetos por naturaleza: así como
nosotras, los hombres aman sentir que pueden levantarse a la vieja más linda
del lugar. No seas ilusa y no confundas cuando un hombre está coqueteando solo
por hacerle bien a su ego, con amor. Hay que ser muy perspicaces y pillarse la
intención que tiene. Puede que termines con el corazón roto porque después que
te pidió tu número, le salieron telarañas al teléfono esperando a que te
llamara.
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Las cosas cambian una vez te desnudas: el peor y más grave
error de todos es creer
que acostarte con él te dará poder. No irte a la cama a la primera, es
lo que te da el mando de la situación. Tener el poder de decidir sobre cuándo y
cómo sucederá, hará que te desee desesperadamente. Si quieres mandar sobre
algo, hazlo sobre tus pantalones y decide acertadamente cuándo dejarlos caer.
Además, tener el control
te hará sentir más sexy.
- Vemos lo que queremos e ignoramos lo demás:
cuando decimos lo demás nos referimos a las malas cosas. Que se coma las uñas,
que sea mal educado, que no sea cordial y que con unos tragos de más medio se
le moja la canoa o se pasa de cariñosito con sus amigas... son cosas que no debes ignorar.
Por más que un chico te atraiga, hay que mantener la perspectiva. No disfraces al sapo de príncipe azul solo porque tienes
miedo a quedarte solterona. Sé sincera y aprende a escoger tu pareja.
Porque puede que te arrepientas.
Finalmente algo que no debes olvidar,
probablemente nunca entendamos a los hombres así que ríndete ante este gran
reto, que es por cierto una pérdida de tiempo. Y concéntrate en entenderte a ti misma y a conocerte cada
días más. Con esta tarea te aseguramos tendrás para rato.
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