Si
tu quieres que tus actos tengan el poder, repítelos a menudo. Tus hábitos
sólidamente establecidos dejan de ser caprichos ocasionales.
Hay límites a lo que puedes hacer en un instante. Sin
embargo, cuando tu centras
tus acciones en alcanzar un objetivo durante muchos días, meses, o años, logras
cosas realmente sorprendentes.
Es muy bueno en la vida tener muchas habilidades, mucho
dinero y estar rodeado amigos que te ayuden. Sin embargo, sin tu persistencia, no llegarás
a ninguna parte.
Con acciones persistentes, puedes llegar a donde deseas
estar. Cuando pones todo
tu esfuerzo en alcanzar tus sueños, una y otra vez, esos sueños llegan a
convertirse en algo real.
El camino que elijas es importante, pídele a Dios que te
ilumine. Pero más
importante es quedarse en ese camino, cada momento, cada día, hasta que
alcances tus metas.
Dale a tu vida el poder de la persistencia. Disfrutarás trabajar de manera
constante el camino que elegiste en busca de obtener tu propia realización.
Persistir, insistir y nunca desistir.
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