¿Qué puedo decirte cuando la vida es tan corta
como una ilusión? Quizás nada que no sepas ya, pero sí algo que se quede
pegado a tu alma. No pretendo enseñarte el mundo, porque yo también estoy aprendiendo. Pero si
algo vale la pena, es disfrutar
cada día, porque amar, de verdad, es un privilegio.
Di lo que sientas, sin miedo. Haz lo que piensas, sin remordimientos. Da lo
que tengas, porque el amor no guarda nada. Y pase lo que pase, nunca te arrepientas. Si no
llega lo que esperabas, no te conformes, jamás te detengas.
Recuerda que eres del tamaño de tus pensamientos,
que los sentimientos valen más que cualquier cosa que el dinero pueda
comprar. No te permitas fracasar por miedo o dudas. Y cuando llegue ese
momento en que sientas que quieres volar, aunque no estemos juntos, los recuerdos siempre
estarán ahí, esperándote para ser vividos de nuevo.
Sé lo que quieras ser, pero sé tú misma. No te limites por lo que digan, porque lo
más hermoso de ti es lo que te hace única. Y por encima de todo, nunca te olvides de Dios,
porque en su luz encontrarás la fuerza para seguir.
Hoy te lo
digo con el corazón lleno: vuela alto, siente profundo y no te olvides de soñar. Porque, como te quiero yo,
así deberías quererte tú.
Sé tú misma, vuela alto y no te olvides de sentir.

No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios