Todos
hemos tenido un jefe insoportable. La buena noticia es que podemos
identificarlos y tratar de que nuestra situación sea un poco más soportable:
1. El
microgerente: no sigue a todos
lados, exige informes de estatus cada 38 segundos y nos dice cómo hacer cada
una de las tareas. Antídoto: no debemos evitarlo o la situación empeorará. Lo mejor es presentarle los repotes de
estatus hasta que se sienta cómodo con nuestro trabajo.
2. El
político: está dispuesto a
tirarnos bajo un autobús para salvar su pellejo. Evita cualquier conflicto.
Antídoto: debemos entender que su único objetivo es ascender. Por tanto, debemos tratar de que vea que nuestro
proyecto puede impulsar su agenda y su carrera.
3. El robacrédito: "Hola jefe,
mira este maravilloso proyecto que hice. No, mi equipo no me ayudó para nada.
Lo hice yo solo". Antídoto: quieren aparentar porque son inseguros. Cuando
presentemos un proyecto, debemos darle
mucho crédito a nuestro jefe independientemente de que haya o no participado en
el mismo.
4. El sabelotodo: "Así no se
hace. Se hace así". Antídoto: debemos
usar el método socrático; es decir, ir haciéndole
preguntas lógicas hasta que él mismo se dé cuenta de cuál es la única respuesta
correcta. Pero debemos permitir que
sea él quien saque la conclusión.
5. El incompetente: este jefe no sabe cómo
salir de una habitación que sólo tiene una salida. Antídoto: debemos reunirnos cada semana con él para
enseñarle un nuevo aspecto del negocio (sí, debemos entrenar al jefe).
6. El
malvavisco: se deja manipular por
colegas más agresivos. Nunca da su opinión. Prefiere la paz al progreso.
Antídoto: debemos ayudarlo a conseguir
pequeñas victorias.
7. El vago: su
escritorio está cubierto de pilas y pilas de papeles. Antídoto: sólo debemos darles las tareas más críticas;
esas que sólo él puede hacer.
8. El
pendenciero: grita, insulta y
denigra. Amenaza a los empleados. Antídoto: primero, debemos decirles que nos sentimos amenazados. Si esto no funciona,
debemos denunciarlo en el departamento de recursos humanos.
NOTA: ESTAS FORMULAS PUDEN SERVIR PERO NO SON SOSTENIBLES EN EL TIEMPO
HAY QUE TENER PERSONALIDAD PARA HACERLE FRENTE AL PROBLEMA Y SABER DECIR
LAS COSAS COMO SON SIN HERIR A NADIE.
TODOS SOMOS HUMANOS, LLENOS DE VIRTUDES Y DEFECTOS
PUEDE PEDIRLE A DIOS QUE LO ILUMINE Y LE AYUDE A
ENCONTRAR EL MEJOR CAMINO Y DONDE TODOS SALGAN GANANDO.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios