DISFRUTA DE TI MISMA

Para conseguir lo que quieres debes encontrarte en un estado de satisfacción pero emocionado por obtener más. No puedes deshacerte de algo hasta que lo ames.  -Abraham-Hicks--

No puedes deshacerte de tu soledad hasta que la ames y una de las formas más prácticas en las que ayudo a mis clientes a sentirse satisfechos sin su pareja y sobre todo a amar su soledad es ejercitarlos para que disfruten de si mismos y de su propia compañía.

Si eres una persona que no soporta la soledad, lo más probable es que la estés re-creando con tu sentimiento de miedo.

Mini - Ejercicio: Comienza a amar los momentos de soledad por su potencial de permitirte conocerte, trabajar en ti misma, hablar contigo etcétera.

Realiza algunas actividades en solitario y date cuenta de lo mucho que puedes disfrutar contigo, tienes muchas ideas en la cabeza, muchas anécdotas que contarte, eres inteligente, divertida, fascinante.

Cuando te des cuenta de tu belleza y disfrutes de ti misma y de tu propia soledad eliminarás gran parte de la estática que te impide encontrar a tu pareja ideal.

REFLEXIONES DE UN SACERDOTE: DISFRUTA DE TI MISMA

En un mundo que nos exige constantemente, es fácil olvidarnos de lo más importante: nosotros mismos. Es fundamental dedicar tiempo a disfrutar de nuestra propia compañía, a conectar con nuestro ser interior y a cultivar la felicidad personal.

Aquí te comparto algunas reflexiones para que aprendas a disfrutar de ti misma:

• Descúbrete a ti misma: Explora tus intereses, pasiones y talentos. Dedica tiempo a actividades que te hagan sentir bien y te llenen de satisfacción.
• Cuida tu cuerpo y tu mente: Alimentate de forma saludable, haz ejercicio regularmente y cultiva hábitos de sueño adecuados. Practica técnicas de relajación como la meditación o el yoga.
• Rodéate de personas positivas: Elige estar cerca de personas que te apoyan, te inspiran y te hacen sentir bien.
• Agradece lo que tienes: Haz una lista de las cosas que agradeces en tu vida, tanto grandes como pequeñas.
• Perdónate a ti misma: Todos cometemos errores. Aprende a perdonarte y seguir adelante sin culpa ni rencor.
• Quiérete y acéptate tal como eres: Eres valiosa y digna de amor, con todas tus virtudes y defectos.

Disfrutar de ti misma no es un acto egoísta, sino una necesidad para ser feliz y plena. Al cuidarte y amarte a ti misma, estás en mejor disposición para amar y dar a los demás.

Que la bendición de Dios te acompañe en este camino hacia el amor propio y la felicidad personal.