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VIDA AMOR Y RISA

La Salud Real es la Salud Interior. “Puedes conseguir lo que quieras mediante la meditación. Sólo pídelo en meditación profunda y sucederá.” Es el lenguaje de tus deseos el que habla en este caso. La verdad es precisamente lo opuesto.
La gente que confía en sí misma puede confiar en otros. La gente que no confía en sí misma no puede confiar en nadie. De la confianza en uno mismo, surge la confianza.


¿Quiénes son esas personas que no pueden confiar en sí mismas? Son las personas que no tienen una auto-imagen muy buena. Se sienten siempre culpables y siempre sienten que están equivocadas. Siempre están a la defensiva y tratan siempre de probar que no están equivocadas, pero en lo profundo sienten que están equivocadas.

Hay muchas razones para creer que el mundo es bueno.

Si en tu niñez hubo un entorno profundo de amor a tu alrededor, surgirá la confianza.

Un hombre te engaña e intenta profundamente destruir tu confianza. Tal ves la confianza en ese hombre se destruya, pero no comenzarás a desconfiar de toda la humanidad.

En el mundo moderno el amor ha desaparecido, y la confianza no es nada más que la crema del amor. El amor ha desaparecido. Los niños nacen en familias en donde el padre y la madre no están enamorados. Los niños nacen; a la madre no le importa, no se molesta por lo que les sucede. El niño absorbe esa actitud negativa. Él no puede confiar en la madre.

La confianza es el alimento más sutil para la vida. Si no confías no puedes vivir en realidad. Siempre tienes miedo; la muerte te rodea, no la vida. Con una profunda confianza en tu interior, la visión entera cambia.

La gente es susceptible. No desea crítica, no quiere que alguien le diga qué hacer; no quiere que alguien le diga lo que no hay que hacer.

Tienes que ir hacia atrás. Tienes que hurgar profundamente en tus memorias. Tienes que adentrarte en tu pasado. Tienes que limpiar tu mente de las impresiones pasadas; libérate de ese peso. Ésta es la llave para hacerlo: si puedes ir hacia atrás no sólo como memoria, sino reviviéndolo.

Haz de esto una meditación. Diariamente, por la noche, durante una hora simplemente ve hacia atrás. Intenta descubrir todo lo que ha sucedido en tu infancia. Cuanto más profundamente puedas ir mejor — porque estamos ocultando muchas cosas que han sucedido, pero no permitimos que emerjan en la consciencia. Permite que emerjan.

Yendo a diario, sentirás que vas más y más profundo. Primero recordarás algo de cuando tenías cuatro o cinco años, y no podrás ir más allá de eso. Poco a poco, verás que vas más profundo: tres años, dos años.

La confianza nace del amor, y si te das cuenta de que no puedes confiar, entonces tienes que trabajar duro. Tienes un pasado muy cargado, cargado equivocadamente. Tienes que limpiarlo, despejarlo.

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