“VE POR EL SÍ…”
Cuando
discutes acerca de un tema, regularmente lo primero que fluye en la
conversación son los puntos en los cuales tienen diferencias.
No te preocupes eso lo hace todo el mundo. Si aprendes a romper con esta inercia, lograras tener control de la
situación y podrás solucionar cualquier problema mucho más fácilmente de lo que
imaginas.
Básicamente
la técnica es destacar los acuerdos y no estancarse en los desacuerdos.
El gran filósofo griego Sócrates conseguía lo que quería
de sus interlocutores, su fórmula invencible era: lograba que dijeran “sí” por lo menos 5 a 7 veces al
inicio del dialogo.
Como lo lograba?
HACIENDO PREGUNTAS…
Discutir no te lleva a ningún lado, sin embargo ver las cosas desde el punto de
vista del otro es mucho más provechoso y te permite hacer las preguntas
adecuadas para lograr “si, si, si”.
Los pasos que debes seguir son muy sencillos:
1. Pregunta. No presiones, no resuelvas, no concluyas…
pregunta, pregunta y no te canses de preguntar, toda respuesta te da información útil de los intereses
REALES de la otra persona.
2. Enfócate en las cosas que se tienen en
común. Siempre hay actividades, personas, recuerdos, etc en los que se
tiene un interés común. Enfócate en
ellos, destácalos todo el tiempo, sobre todo cuando la plática se torna en
discusión.
3. Busca el “sí”. Sigue el consejo
del viejo sabio, haz que
la otra persona repita la palabra “sí” más de 5 veces al inicio de la
plática, esto abre el dialogo de una manera positiva.
Es muy fácil ver el efecto y el poder del “sí”.
Mira haz el siguiente ejercicio: mañana en la tarde,
después de haber concluido la primera parte de la jornada laboral, observa a tu
alrededor y escoge una persona que de manera evidente se muestre que está
atravesando por un problema. Piensa a
detalle 5 preguntas que la respuesta sea ineludiblemente un “si” contundente:
“Oye llevas trabajando aquí -X- tiempo verdad?”,
“No te gustaría irte a descansar en este mismo momento?”,
etc etc,
No concluyas nada, simplemente analiza su rostro y su lenguaje corporal,
veras como después de la quinta o sexta afirmación, empieza a relajarse y cambia. Veras como aún no se ha resuelto ningún
problema y ya se tiene una actitud más favorable verdad?
Haz
el ejercicio. Es increíble el
efecto de transformación que comienza con un simple “sí”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios