PAREJAS FELICES

Mitos y realidades desde la mirada de un psicólogo

Las películas, las novelas románticas y las canciones nos inundan con imágenes de parejas perfectas que viven en una felicidad eterna. Sin embargo, la realidad de las relaciones de pareja es a menudo más compleja y desafiante que lo que nos muestra la ficción.

Como psicólogo experto en relaciones de pareja, puedo afirmar que si bien la felicidad en pareja es posible, no se trata de un estado permanente ni de un cuento de hadas hecho realidad. Es un camino que se construye día a día con esfuerzo, compromiso y la capacidad de adaptarse a los cambios y desafíos que se presentan a lo largo del tiempo.

Desmontando mitos sobre las parejas felices

• El mito del amor perfecto: No existe una pareja perfecta ni una relación libre de conflictos. Las parejas felices son aquellas que han aprendido a manejar las diferencias, a comunicarse de manera efectiva y a superar los obstáculos juntos.
• El mito de la felicidad constante: La felicidad en pareja no es un estado permanente, sino un conjunto de momentos felices compartidos. Hay altibajos, momentos difíciles y crisis que deben afrontarse como equipo.
• El mito de la dependencia emocional: Las parejas felices no son dependientes el uno del otro. Son dos individuos independientes que han elegido compartir su vida y construir un proyecto en común.
• El mito de la ausencia de conflictos: Los conflictos son inevitables en cualquier relación. La clave está en cómo se manejan: con respeto, comunicación y la voluntad de encontrar soluciones juntos.

Realidades de las parejas felices:

Si quieres mantener una relación estable y feliz, te damos algunos consejos para que analices los pongas en práctica junto a tu ser amado/a.

• Atracción: no solo debe ser física, también es importante que te sientas interesado/a en la forma de ser de la otra persona, sus cualidades, intereses y hasta los defectos.
• Comunicación: la base de toda relación es la comunicación. Hablar claramente y con respeto siempre hará que ambos se entiendan, se acoplen entre sí y resuelvan sus diferencias de forma asertiva.
• Tolerancia: muchas personas piensan  que su pareja debe pensar y actuarigual sin apreciar las diferencias que puedan existir entre ambos. Respetar y tolerar esas diferencias hará crecer la relación.
• Comprensión: entender a tu pareja es fundamental. Cada gesto, palabra o acto tiene un porque. Nunca asumas nada, habla sobre la situación para comprender mejor y apoyarse mutuamente.
• Amor: sin amor no existe nada. Ambos deben quererse para estar juntos. Este sentimiento mueve la relación y te hace aceptar al otro tal y como es sin condiciones. El amor propio no debe faltar, debes querer tu primero para querer a los demás.
• Espacio: ser pareja no quiere decir hacer todo juntos. Cada quien necesita tener su propio espacio para distraerse y compartir con los demás. No acapares el tiempo de tu ser amado/a. manejen un balance adecuado para no interferir en la vida del otro.
• Apoyo: echarse la mano entre los dos es básico. Si ambos estudian,  trabajan deben comprender y respetar ese tiempo. 
• Compromiso mutuo: Las parejas felices están comprometidas con la relación y dispuestas a trabajar juntas para superar los obstáculos que se presenten.
• Confianza mutua: Creen en la integridad, lealtad y buenas intenciones de su pareja.
• Respeto mutuo: Valoran las opiniones, ideas y sentimientos del otro, incluso cuando no están de acuerdo.
• Perdón y reconciliación: Saben perdonar las ofensas y trabajar juntos para reparar los daños causados.
• Crecimiento personal y de la pareja: Fomentan el desarrollo personal de cada uno y apoyan el crecimiento mutuo.

Cultivando la felicidad en pareja:

La felicidad en pareja no es un destino final, sino un camino que se construye día a día. Algunas claves para cultivarla son:

• Mantener viva la llama del amor: Dedicar tiempo de calidad a la pareja, expresar afecto y realizar actividades juntos que fortalezcan el vínculo.
• Comunicarse de manera efectiva: Hablar con honestidad, escuchar atentamente y evitar la comunicación pasivo-agresiva.
• Resolver conflictos de manera constructiva: Enfocarse en el problema, no en la persona. Hablar con respeto y buscar soluciones juntos.
• Alimentar la conexión emocional: Compartir intereses, aficiones y sueños. Crear experiencias juntos que generen recuerdos felices.
• Mantener una vida individual plena: Dedicar tiempo a hobbies, amistades y actividades personales. No perder la identidad individual en la relación.
• Buscar ayuda profesional cuando sea necesario: Si la pareja atraviesa por dificultades que no pueden superar por sí mismos, no dudar en buscar apoyo psicológico.

Evalúa tu relación

Saber si tú y tu pareja cumplen con la mayoría de factores o fallan en alguno de estos, te permitirá  hacer un análisis de la relación. Por ello es importante desarrollar la habilidad de escuchar todo lo que tiene que decir tu pareja, para que puedas mantener una convivencia sana, feliz y libre de conflictos.

En conclusión:

Las parejas felices no son perfectas, pero sí han aprendido a navegar por los desafíos de la vida en pareja con amor, respeto, comunicación y compromiso. Si bien la felicidad eterna no existe, cultivar estos ingredientes esenciales puede aumentar significativamente las posibilidades de construir una relación duradera y satisfactoria.

Recuerda que la felicidad en pareja es un camino que se recorre juntos, día a día. Es un proceso que requiere esfuerzo, dedicación y la capacidad de adaptarse a los cambios. Si ambos están dispuestos a poner su parte, la felicidad duradera puede estar a su alcance.

Así como existen actitudes que matan pasiones, hay otras que fomentan el amor y al mismo tiempo el crecimiento de la pareja.

 

Reflexiones de un sacerdote:

Las parejas felices son aquellas que encuentran en su amor un reflejo del amor divino. Se sostienen mutuamente en la fe, el respeto y la comprensión. Su relación es un testimonio del compromiso de Dios con su pueblo: inquebrantable y lleno de gracia. En su unión, descubren la belleza de la entrega desinteresada y la alegría de compartir la vida en comunión. Que su amor sea un faro de esperanza y inspiración para otros, recordándonos que en la unión sagrada, encontramos la plenitud de la bendición divina.Que su unión sea un reflejo del amor infinito de Dios en el mundo.

NOTA:"El amor es la fuerza más poderosa del universo." - Paulo Coelho