PAPA FRANCISCO EN LA FAMILIA SE APRENDE A AMAR

Frases del papa Francisco

• Mantengamos viva nuestra fe con la oración y los sacramentos. Atención: No nos olvidemos de Dios.
• Es necesario aprender de la Virgen María, imitando la total disponibilidad con la que recibió a Cristo en su vida.
• En la familia se aprende a amar y a reconocer la dignidad de todas las personas, especialmente a las más débiles.
• Todo cristiano, en su puesto de trabajo, puede dar testimonio, con sus palabras y más aún con una vida honrada.
• El Señor siempre nos perdona y nos acompaña. Es cuestión nuestra dejarnos perdonar y acompañar.
• A veces nos encerramos en nosotros mismos... Señor, ayúdanos a salir al encuentro de los demás, a servir a los más débiles.
• Cuiden la creación. Pero, sobre todo, cuiden a las personas que no tienen lo necesario para vivir.
• El Espíritu Santo transforma y renueva, crea armonía y unidad, da fuerza y gozo para la misión.
• ¡Que una cadena de compromiso por la paz una a todos los hombres y mujeres de buena voluntad! 
• Todos somos pecadores, pero vivamos la alegría del perdón de Dios y tengamos confianza en su misericordia.
• Cristo nos guía a salir cada vez más de nosotros mismos, para entregarnos y servir a los demás.
• Al comenzar mi viaje a Corea, los invito a unirse a mi oración por este País y por toda Asia.
• ¿Cómo ser felices en el matrimonio? Unidos en el Señor, que hace siempre nuevo el amor y más fuerte que ninguna dificultad.
• Nos resulta difícil perdonar a los otros. Señor, concédenos tu misericordia para ser capaces de perdonar siempre.
• Entablemos una profunda amistad con Jesús: así podremos seguirlo de cerca y vivir con Él y para Él.
• Les deseo a todos que puedan disfrutar de un maravilloso Mundial de fútbol, con un espíritu de verdadera fraternidad.
• Hoy, muchas de las pobrezas morales y materiales vienen del rechazo de Dios y de poner en su lugar a tantos ídolos.
• Una sociedad que abandona a los niños y a los ancianos cercena sus raíces y oscurece su futuro.
• Si los bienes materiales y el dinero se convierten en el centro de la vida, nos atrapan y nos esclavizan.
• Pidamos un corazón que acoja a los inmigrantes. Dios nos juzgará según hayamos tratado a los más necesitados.
• Dios bendiga a Corea y en especial a sus ancianos y jóvenes.
• No existe un cristianismo “low-cost”. Seguir a Jesús implica ir contracorriente, renunciar al mal y al egoísmo
• Cada día rezo por quienes sufren en Irak. Recen conmigo.
• Todos los matrimonios pasan por momentos difíciles, pero estos encuentros con la Cruz nos fortalecen para recorrer el camino del amor.
• Pidamos al Señor la gracia de no hablar mal de nadie, de no criticar, de no chismorrear, de querer a todos.