ACEPTAR, SOLTAR Y SANAR

Hay tres verbos que te llevan del suelo al cielo, de las sombras a la luz, del llanto a la alegría: Soltar, aceptar y sanar.

Aceptar es lo contrario de pelear o batallar con la realidad. Donde hay aceptación amorosa. no hay lugar para el sufrimiento.
Por tanto, acéptate como eres, acepta a los otros como son y asume la realidad con sus flores y sus espinas. No hagas resistencia.

Soltar es dejar de cargar odios, culpas, rabias y tristezas que te roban la paz y la felicidad. Soltar es lo mismo que perdonarte y perdonar.

¿Cómo puedes estar bien cargando los pesos del ayer? Recuerda que sin perdón el pasado es bien pesado. Suelta y serás feliz.

Sanar es cicatrizar heridas emocionales con un amor generoso y una infinita compasión. Quien te hizo daño estaba en la inconsciencia.

Sanar es comprender al que falla para no estar anclado en un ayer espinoso que te oscurece el presente y te destruye el porvenir.

Sé libre y feliz con estas tres acciones maravillosas: Aceptar, soltar y sanar. Ámate y da un salto cuántico de las tinieblas a la luz y al gozo.