Estuve en el Espíritu y me encontré junto al Señor
observando un juego de pelota. El equipo del Señor estaba jugando contra el
equipo de Satanás y le tocaba batear al equipo del Señor en la última parte de
la novena entrada con dos outs.
Seguimos mirando cuando el
próximo bateador llegó al plato y su nombre era el Amor.
El Amor tiró a la primera tirada e hizo un imparable ya que
el Amor nunca falla. El próximo bateador era la Fe, que también logró otro
imparable ya que la Fe y el Amor siempre trabajan juntos.
El próximo bateador era la
Sabiduría. Satanás inició movimiento y tiró su primera tirada, pero la
Sabiduría lo miró bien y lo hizo pasar, porque la Sabiduría nunca se deja
engañar por las trampas de Satanás. Primera bola. Con tres tiradas más, la
Sabiduría pasó a primera base con cuatro bolas.
Con las bases llenas, el
Señor me dijo que el siguiente bateador era su jugador estrella. La Gracia se
acercó al plato. Yo comenté que no parecía un jugador valioso. Todo el equipo
de Satanás pensó lo mismo y no se interesaron cuando vieron la Gracia.
Pensando que había ganado el juego, Satanás inició
movimiento y tiró su primera tirada. Para el asombró de todos, la Gracia
conectó con la pelota más duro que nadie.
Pero Satanás no se
mostraba preocupado ya que su jugador del campo central, el Principado del
Aire, dejaba pasar muy pocos bombos. Cuando fue a coger la pelota, le pasó el
guante, le dio en la cabeza y lo mandó contra el suelo.
Después de rebotar de la
cabeza del Principado del Aire, la pelota pasó por encima de la verja para un
cuadrangular. El equipo del Señor ganó el juego.
El Señor entonces me preguntó si yo sabía por qué el Amor,
la Fe y la Sabiduría pudieron ponerse en base pero no podían ganar el juego. Le
contesté que no sabía.
El Señor me explicó: «Si
tu amor , tu fe y tu sabiduría hubiesen ganado el juego, entonces pensarías que
tú mismo lo hiciste.
El amor, la fe y la sabiduría pueden ponerse en base, pero
solo mi gracia te puede hacer llegar a «Ganar». Mi gracia es lo que Satanás
nunca puede detener».
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios