Cuando los que mandan pierden la vergüenza, los que obedecen pierden el respeto.
Un hombre debe vivir cerca de sus superiores como cerca del fuego: ni tan cerca que se queme ni tan lejos que se hiele.
En una jerarquía, todo empleado tiende a ascender hasta su nivel de incompetencia.
El general ha de ser considerado, y el soldado obediente.
El mando de muchos no es bueno; basta un solo jefe.
Si dos cabalgan en un caballo, uno debe ir detrás.
Donde hay patrón, no manda marinero.
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