DESPERTAR LA CREATIVIDAD

TODOS SOMOS CREATIVOS

Todo el mundo tiene la capacidad de ser creativo y puede mejorar sus habilidades con dedicación, ejercicios y técnicas. Lo malo es que con el paso de los años se pierde la frescura en la mirada de las cosas y, poco a poco, se va debilitando la creatividad. Los principales enemigos de la inventiva son estos: excesiva especialización, rutina, falta de tiempo, miedo y desconfianza.

Para ser creativo elige levantarte del sofá de lo conocido, en el que te quedas porque te parece cómodo y seguro. Da Vinci, Beethoven, Madame Curie o Einstein, comenzaron con ideas pequeñas y una gran confianza. Anímate y sé creativo en todo: trabajo, estudio, relaciones, vida íntima, deportes y en la misma fe.

Libera tu imaginación, siéntate y escribe los pensamientos que te lleguen al seguir esta idea clave de los inventores: que tal si... luego piensas que tal si quito esto, pongo aquello, cambio lo de más allá, innovo, retoco o mejoro algo. Tú eres creativo, créelo, ponlo en práctica y no dejes que la rutina acabe con tu vida. Cree que la vida está llena de luz y de esperanza cuando avanzas decidido y sin temor.

Atrévete a abrazar lo desconocido, a soñar con otros horizontes, elige seguir un nuevo libreto. Te cuesta salir de lo trillado, pero la vida te llama a hacer cambios y a salir de la rigidez mental. Hay ciclos que necesitas cerrar, porque te amarran. Sé también creativo en el amor y no sufras más con relaciones abusivas. Viniste al mundo para ser feliz y puedes mejorar tu autoestima, valorarte y decir: ¡ya no más!

Del experto en creatividad, Roger von Oech son estas sugerencias para volar en el espacio luminoso de la innovación:

Identifica aquello que hace que tu capacidad creativa fluya: un lugar, una música, una pregunta.

Encuentra bajo qué condiciones surgen tus mejores ideas.

Programa días 'aislados' en los que te retires solo, a pensar. No es un día de vacaciones es un momento para repensar, aislado de la presión diaria.

Baja tus ideas, no las dejes en tu cabeza, comunícalas, empieza a materializarlas.

El exceso de estudios previos puede anular las innovaciones. No castigues, ni rechaces las fallas, antes bien, celébralas como fuente de aprendizaje. El creativo tiene una mente abierta, hace preguntas, sabe escuchar y vive aprendiendo y desaprendiendo.

"La flexibilidad y la humildad son dos valores vitales para un creativo, y para que una persona y un equipo sigan prosperando. Hay que tener humildad para oír a los clientes, buscar ideas afuera y enfrentar cuestiones complejas. La soberbia y el ego mantienen a muchas empresas en jaque y caen en el exceso de confianza. Sólo con humildad y flexibilidad percibes los cambios y reaccionas con rapidez.

Quien ha enfrentado malos ratos puede ser más humilde y más valiente que quien ha navegado en aguas mansas. Tener humildad es contribuir sin alardes y servir a la empresa sin protagonismos. Es aceptar que dependes de otras personas. “Hay pocas cosas que puedo hacer por mi cuenta, pero hay muchas que puedo hacer con mi equipo".